Del Tribuna Campeche (Opinión)
Enrique Pastor CRUZ CARRANZA
“La traición la emplean únicamente aquellos que no han llegado a comprender el gran tesoro que posee, siendo dueño de una conciencia honrada y pura”,
Vicente Espinal.
De verdad que no hay día que no amanezcamos con una fulgurante noticia de ocho columnas en todos los medios —no alineados— donde se refleja la colosal inoperancia de quienes al margen de su ilegitimidad democrática al frente de las instituciones, cada movimiento los hunde en el océano de la ineptitud, la inoperancia, la mediocridad y con el sello de la casa: ¡la frenética corrupción vocacional a flor de piel!
Es la cumbre de la desfachatez, no sólo negar la existencia de excedentes en la venta del crudo por encima de los 120 dólares, sino un auténtico asalto a la razón, asegurar que los casi 15 mil millones de pesos, que la Secretaría de Hacienda y Crédito Publico considera ejercerlos en subsidios a la gasolina y en detrimento de los estados, ahora resulte que se está siendo reservado para el colosal “cañonazo legislativo” de un monto promedio de 2.5 millones de dólares a los legisladores requeridos, para que la dupla que usufructa el poder público sin legitimidad en las urnas, con la impericia titiritera del español Mouriño y Calderón les puedan cumplir a sus electores Hallibourton y Repsol la entrega —cual tributo— del patrimonio energético de los mexicanos con Pemex.
Importante será no dejar como simple nota informativa o fruto de protagonismo la denuncia del diputado federal convergente, Cuauhtémoc Velasco Oliva, quien ha puesto el dedo sobre la llaga en la colosal danza de los millones que gravitan en la obsesión calderonista por despojar a la nación del sector energético, vía legalización parlamentaria, de la misma manera que se aprobó el Fobaproa en detrimento de la economía de la nación y generaciones que aún no nacen, donde Felipe Calderón jugó el papel determinante con sus mentiras de oponerse y al final apoyó hasta la ignominia (¿maiceado?) para su aprobación.
En esta maraña de putrefacción y traiciones dignas de los mejores tiempos de Antonio López de Santa Anna o Victoriano Huerta, la agencia de noticias Apro relata los hechos del virtual cohecho y dibuja con genialidad demencial digna de un Salvador Dalí, la abstracta e impresionista moral republicana del panismo de Germán Martínez Cáceres, célebre por su efímero pero encubridor paso en la Secretaría de la Disfunción Pública “blindando con la impunidad” a los Bribiescas, que fue premiado en la dirigencia del PAN como joya de la operatividad corruptora a los y las legisladoras que se presten prostituir sus votos en el dictamen final de la lucha contra los odiosos nacionalistas del Frente Amplio Progresista (FAP), que siguen luchando sin tregua para acotar el despojo del señoritismo gallego petrolero.
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