Este artículo está dirigido a todo público y no está ideado para dividir, sino para informar acerca del cómo la oligarquía parásita y parasitaria que nos desgobierna ha inculcado en la psique de los mexicanos miedo, odio, apatía, mediocridad, sumisión, confusión, individualismo y polarización social a través de sus medios masivos de comunicación. Para lograrlo nos han moldeado el pensamiento utilizando los mensajes subliminales, las diez estrategias de la manipulación mediática descritas por Noam Chomsky, las técnicas de propaganda de Joseph Goebbels, las necesidades emocionales del individuo que clasifica David Katz y la neuroplasticidad.
Empecemos por definir qué es la neuroplasticidad: es la capacidad que poseen nuestras neuronas cerebrales para modificar las conexiones sinápticas mediante estímulos audiovisuales repetitivos. Así, utilizando el espacio radioeléctrico, los medios de comunicación logran que nuestro cerebro construya el andamiaje neuronal que responda a los intereses de la oligarquía. Implantan en nuestro cerebro sus ideas, modas, estilos de vida e ideología, y nos dictan qué comer, beber, sentir, hablar, vestir y cómo pensar y actuar.
Pueden encontrar una explicación más amplia de lo anterior en el siguiente artículo: Televisión, Manipulación y Neuroplasticidad:
https://www.facebook.com/note.php?note_id=178136512218854
Aunado a lo anterior, el sistema tergiversa y hace suyos términos propios de la ideología de izquierda para crear la confusión necesaria que hace posible la división entre las distintas corrientes de izquierda existentes. Creo oportuno describir qué es la ideología de izquierda para seguir demostrando cómo es que algunos, que no hemos internalizado y adoptado la ideología de izquierda, nos convertimos en cómplices, voluntarios o involuntarios, de la oligarquía a la cual según nosotros estamos enfrentando. Para ello me apoyo en lo que el filósofo Adolfo Sánchez Vázquez define como izquierda:
A lo largo de su obra, Sánchez Vázquez nos dice que ser de izquierda es estar por un modelo de desarrollo que responda a los intereses y necesidades de las mayorías, y, por ende, ir en contra de un sistema que favorezca al egoísmo de una minoría y a los intereses ajenos (ya sean gobiernos extranjeros o de transnacionales). Es oponerse a las relaciones desiguales y de dependencia entre las naciones y repudiar las prácticas hegemónicas y neocolonialistas de las potencias; estar por un desarrollo sustentable que no amenace la vida humana y planetaria, y por tanto, defender las reivindicaciones ecológicas. Ser de izquierda es combatir toda forma de discriminación, asumir y luchar por los derechos de todas las personas sin importar su género, raza, etnia, condición, creencias, orientación sexual o nacionalidad, pues la más mínima manifestación discriminatoria “deshonra al individuo, grupo social o poder que lo tolera o promueve”. Ser de izquierda es hacer una política que no confunda ni separe los fines y los medios, que no se guíe por resultados inmediatos e insustanciales ni pierda de vista los valores y principios que le dan sentido en busca de dádivas y prebendas individuales o grupales. En suma, es hacer una política que sea congruente con sus ideales, que sea incorruptible y se sostenga sobre un profundo contenido moral. Ser de izquierda requiere de escepticismo frente al dogmatismo y de una constante crítica y autocrítica. Significa ser crítico de los males sociales producidos por el sistema político-económico imperante, pero también de las deficiencias y debilidades propias; implica tener o sumarse a un proyecto a largo plazo de nación y sociedad, que tenga como fin el que desaparezcan las injusticias sociales; conlleva conocer la realidad y tener claras las posibilidades, las condiciones necesarias y los medios adecuados para transformarla; finalmente, para Sánchez Vázquez, ser de izquierda es tener una voluntad inquebrantable para realizar el proyecto de una sociedad más justa, solidaria, equitativa y libre. No se puede ser de izquierda en teoría o de forma nominal, no se es de izquierda por pertenecer a un partido o grupo específico, o por el sólo hecho de conocer la realidad de los marginados. Pues ser de izquierda es, sobre todo, una praxis. Parafraseando a Marx, la gran mayoría de los filósofos, políticos, intelectuales y líderes de opinión se limitan a interpretar y opinar sobre el mundo; cuando de lo que se trata es de transformarlo. Para Sánchez Vázquez, más que una posición, ser de izquierda es una práctica diaria y cotidiana, un hacer, es actuar conforme a lo que se sostiene en la palabra, el discurso o la teoría, ser congruente y practicar lo que se piensa y se dice. De lo que realmente se trata el ser de izquierda no es de posicionarse, sino de transformar al mundo.
Si algún partido político o miembro de la izquierda no internaliza esta definición, simplemente no es de izquierda. Que no siga perdiendo su tiempo y se vaya a la derecha!!!
Ahora bien, teniendo ya una definición de izquierda y tomando en cuenta a las diferentes izquierdas que hay en México, propongo el siguiente ejemplo para darnos cuenta cómo y qué es lo que tenemos que hacer para transformar la profunda crisis política, económica, social, educativa, cultural, de inseguridad y violencia que padece México:
Supongamos que la patria (México) es atropellada por la banda del carro rojo que conduce un borracho (FeCal y la oligarquía parásita) y ésta está agonizando. Todas las corrientes de izquierda acuden a su auxilio!!! Llegan los marxistas y proponen que hay que operar a la patria inmediatamente, es decir llegar al comunismo de forma directa, sin haber checado los signos vitales de la patria ni estabilizarla para poder trasladarla al hospital. Los guerrilleros proponen perseguir a la banda del carro rojo que atropelló a la patria y eliminarla, lo malo es que enfrentan a las fuerzas bélicas de la banda del carro rojo y no a las cabezas que conforman dicha banda. Los zapatistas opinan que ya la patria está podrida y no tiene caso auxiliarla y que es mejor crear una nueva patria donde quepan todas las patrias, pero sin entrarle al juego político que la banda del carro rojo nos ha impuesto para no caer en la tentación de formar parte de ella. Los sicilianos proponen ir con la banda del carro rojo y hacerles entrar en razón de que ya no pueden seguir atropellando a la patria, aunque está siga desangrándose; confían en que al borracho se le quite lo briago y lo parásito a la oligarquía, dando besos y abrazos. Llegan los candidatos ciudadanos y proponen ser parte de la banda del carro rojo, pero con ciudadanos “puros”, sin ponerse a analizar que la gravedad de la patria obedece a las leyes y acuerdos que la banda del carro rojo ha pactado para atropellarla perpetuarse en el poder, y que no permitirán que un ciudadano sin apoyo de lo poderes fácticos pueda competir en igualdad de circunstancias. Llegan los analfabetos políticos, que anulan o se abstienen de votar, y piensan que llevando a cabo esas acciones, la banda del carro rojo se sentirá ilegítima y cambiará.
Y así podemos seguir enumerando a las diferentes izquierdas que llegan a auxiliar a la patria con sus ideas y formas de sanarla.
Pues bien, en MORENA creemos saber qué y cómo auxiliar a la patria, porque hemos comprendido que no necesitamos políticos más ciudadanos, sino una ciudadanía más politizada para poder transformar de raíz la grave situación en la que se encuentra la patria:
Primero tenemos que tomarle los signos vitales, es decir recorrer todo el país para recoger las necesidades, ideas, propuestas, así como saber sus debilidades y fortalezas para poder diagnosticar el estado de salud de la misma y dar el tratamiento adecuado para salvarla del atropellamiento;
Segundo, tenemos que estabilizarla para poder llevarla al hospital y operarla, es decir necesitamos jugar el juego que la banda del carro rojo ha impuesto y participar informando, concientizando y organizando al pueblo para poder acceder al poder mediante la vía que nos da la opción electoral: si logramos sacar a votar a la mayoría del pueblo podemos revertir y evitar el fraude electoral como lo hicieron en El Salvador en 2009;
Tercero, una vez estabilizada la patria, con el voto al gobierno y con el pueblo al poder, entonces empezar a realizar los cambios necesarios para que la patria pueda ser operada y transformar la vida pública de México. Para ello contamos con un proyecto de nación, el cual fue elaborado por varios expertos en las diferentes áreas del conocimiento para poder llevar a cabo lo que nos proponemos, que es la instauración de una patria justa, equitativa, igualitaria, libre, soberana y que responda a las exigencias y necesidades de todos los mexicanos.
Proyecto de Nación de MORENA:
Si tienen otra opción para salvar a la patria del atropellamiento, expónganlo. Pero deben tomar en cuenta todos los obstáculos que la oligarquía nos impone y la idiosincrasia del pueblo mexicano, así como el poder mediático, económico y bélico que posee esta mafia que nos desgobierna.
También considero importante empezar a transformar a MORENA, aquí y ahora, para hacerlo un instrumento social y político que inicie las transformaciones que requiere el país antes de llegar al poder. Coincido con el siguiente artículo de Víctor M. Toledo:
http://www.jornada.unam.mx/2011/09/22/opinion/022a1pol
Finalmente, les dejo estas frases para la reflexión:
“Admitir finalmente el diálogo, la discusión, el intercambio de razones, lo que significa, por tanto, reconocer que no poseemos el monopolio de la verdad y que estamos abiertos a las razones y a la crítica del otro”. Adolfo Sánchez V.
“El único obstáculo en este pueblo libre, para un cambio social sinceramente deseado, está en la falta de acuerdo de los que lo solicitan” José Martí.
“Y para esa gran masa de neutrales, para los que se han mantenido alejados de la lucha por indiferencia o por timidez, una cordial invitación para que cooperen en la próxima obra de reconstrucción de México, así en lo político como en lo económico y social” Emiliano Zapata.
"La única división que nosotros hacemos es entre los que luchan y los que se entregan". Agustín Tosco.
¡¡¡POR SALUD MENTAL APAGA LA TELEVISIÓN, LEE UN LIBRO Y SÚMATE A MORENA!!!