Alvaro Cepeda Neri
Prólogo Político
En el debate, discusión (y confusión) para proponer medidas que detengan la explosiva inseguridad, generada por la multiplicación y desafíos de la delincuencia, algunas voces, dentro de lo que Impacto, El diario “cabeceó” certeramente: “Medidas desesperadas de Calderón y Ebrard”, se pusieron de lado de la pena de muerte principalmente para los secuestradores.
Y caída en la irritada opinión pública y con toda razón ante los homicidio de sus víctimas (a pesar de cobrar los millonarios rescates), la solución ha tenido algún eco.
El diputado federal Emilio Gamboa Patrón (yucateco, pariente de los Patrón panistas) practicando el “pastoreo” del grupo legislativo priísta y de muy larga cola curricular, suscribió un texto que le hicieron sus asesores (Reforma: 10/VIII/08), titulado: Debe considerarse.
El autor, dice la nota de pie de página, “es coordinador de la bancada del PRI en la Cámara de Diputados” (y faltó agregar: del Congreso General). En sus tantos golpes de computadora, aproximadamente dos cuartillas antiguas, Gamboa Patrón, se muestra indignado y trata de justificar su pronunciamiento a favor de sancionar con quitarles la vida a los que, a su vez, privan de la vida a sus víctimas.
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