El Frente Amplio Progresista (FAP) alerta que en las sesiones del 16 ó 21 de octubre próximos, los partidos Acción Nacional y Revolucionario Institucional buscarían llevar al Pleno del Senado las reformas en materia energética
MEXICO, D.F., 12 de octubre (UNIVERSAL/LA JORNADA).- El Frente Amplio Progresista (FAP), integrado por los partidos de la Revolución Democrática (PRD), Partido del Trabajo (PT) y Convergencia, teme que en las sesiones del 16 ó del 21 de octubre próximos, el de Acción Nacional (PAN) y el Revolucionario Institucional (PRI) busquen llevar al Pleno del Senado las reformas en materia energética.
Los senadores de Convergencia, encabezados por Dante Delgado, serán los que lleven la batuta en caso de tener que tomar acciones en el Senado, además de los más cercanos a López Obrador en la fracción perredista, Ricardo Monreal y la tabasqueña Rosalinda López.
Andrés Manuel López Obrador los instruyó el miércoles pasado a estar “muy atentos” para evitar un albazo del PRI y del PAN.
En los anteproyectos de dictamen de la Ley Reglamentaria del Artículo 27 Constitucional y la Ley Orgánica de Petróleos Mexicanos (PEMEX), que son la base de la reforma energética, pocas propuestas de la iniciativa del Frente Amplio Progresista (FAP) se tomaron en cuenta y lo que predomina son los planteamientos de los proyectos legislativos de Felipe Calderón y del priísta Manlio Fabio Beltrones.
Además de las diferencias de fondo en el capítulo de contratos, donde se dan facultades al Presidente para crear por decreto filiales de la paraestatal dedicadas a la refinación de petróleo y al transporte y distribución del mismo, en lo que se refiere al órgano de gobierno de Pemex, se mantienen a los cinco representantes del Sindicato de Trabajadores Petroleros, en lugar de disminuirlos a dos, como propone el FAP.
En el anteproyecto de dictamen de Ley Orgánica de PEMEX se retoma la propuesta de FeCal de expedir “bonos ciudadanos”, cuyo monto y reglamentación quedará a cargo de la Secretaría de Hacienda y se establece que la paraestatal acudirá a tribunales internacionales, en caso de controversia con alguna trasnacional.
Un análisis preliminar realizado por Mario Di Costanzo, del Consejo de Asesores del FAP, precisa que en ambos anteproyectos de dictamen se mantienen las objetivos privatizadores de las iniciativas de Calderón y del PRI.
Si bien quedó fuera la privatización de las refinerías, planteada en la iniciativa presidencial, se retomó la propuesta de Beltrones de crear filiales de Pemex encargadas de la producir gasolina y otros combustibles.
El también secretario de Hacienda del Gobierno Legítimo advierte que es básicamente el planteamiento del priísta, aunque falta por definir varios puntos centrales. Uno de ellos está encorchetado: “Los consejos de Administración de estos organismos filiales podrán aprobar las adecuaciones a sus presupuestos, el calendario de ejecución de los mismos y su incremento con el base en el financiamiento de sus excedentes de recursos propios, sin requerir la autorización de la Secretaría de Hacienda”,
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