La primera dama de Honduras, Xiomara de Zelaya, expresó que "me siento culpable por haber confiado en Romeo Vásquez Velásquez", el destituido jefe del Estado Mayor Conjunto de las FF.AA., responsable de ejecutar el golpe de Estado del pasado 28 de junio.
En entrevista exclusiva para teleSUR, la esposa de Zelaya recordó que "a través de mi persona se logró, a través de la confianza que puse sobre él, eso hizo que el presidente (Zelaya) se confiara y que ahora esté en esta situación. Me siento responsable" por lo sucedido.
La primera dama hondureña relató que el sábado previo al golpe de Estado y a la consulta por la cuarta urna, recibió una llamada del general Vásquez Velásquez, quien le dijo que no se preocupara y que todo estaba controlado por las Fuerzas Armadas.
"Me dijo que le manifestara al Presidente que ellos estaban esperando que el llegara al Estado Mayor y que se tomara un café con ellos. Esto me confió y le traslade el mensaje a Manuel. No sé no se si tal vez esa confianza que le di sea lo que haya hecho confiar al Presidente", apuntó.
Recordó que en pocas horas, este mismo hombre de confianza, ordenó que allanaran su casa con balas. "Me siento engañada y mi familia también, porque a través de sus mensajes había tranquilidad de parte de ellos. Nunca pensamos que iban a hacer esto", exclamó.
"En en el tiempo que estuvo como Jefe (del Estado Mayor Conjunto) yo tenía un concepto positivo de su persona, pensé que era leal y que estaba acompañando al presidente. Luego me sorprendieron los sucesos, la actitud que adoptó", al dar la orden de secuestrar a Zelaya y sacarlo del país.
Refiriéndose al general Vásquez, Xiomara de Zelaya expresó: "Así como como él en su momento reconoció a Manuel como su comandante, que de la misma forma se acepte, que el Ejército vea en él al Presidente Constitucional de la República y que si su actuación va en base a la Constitución, asuma el puesto que le toca y permita que la situación del país vuelva a la normalidad".
Por otro lado, dijo que con esta espera de 72 horas propuesta por la Organización de Estados Americanos (OEA), queda reflejada la tolerancia de Zelaya, "porque él está buscando su retorno en paz. El deseo de él no es entrar a la fuerza sino cumplir las normas que se han ido estableciendo. Hemos ido agotando la parte diplomática ante este régimen dictatorial militar que ha dado un golpe certero al pueblo hondureño".
Agregó que es triste que un grupo de hondureños que han tomado posiciones importantes no sólo en los partidos que reprsentan sino en el país, sean los que están demostrando su intransigencia para impedir que haya pronto un retorno al orden constitucional en Honduras.
"Creo que no debemos perder la esperanza debe llegar ese momento donde (los golpistas) reflexionen y dejar atrás los intereses particulares y pensar en interes de todos los hondureños", enfatizó.
La primera dama hondureña indicó que la Constitución de ese país reza que ningún hondureño puede ser expatriado. "Entonces creemos que la presencia de Manuel Zelaya, el respaldo del pueblo hondureño que lo ha manifestado en marchas, tomas de carreteras desde todos los rincones del país, ese respaldo (...) es loque va a permitir que vuelva la calma y la paz".
Bloqueo económico afecta a hondureños
En otro orden de ideas, la esposa del presidente legítimo de Honduras, Manuel Zelaya, reveló que los hondureños se están viendo gravemente afectados por el bloqueo económico internacional impuesto por Estados Unidos o la Unión Europea (UE), que no reconocen al gobierno de facto instalado por Micheletti.
"Creo que Estados Unidos es un aliado importante, así como la presión de todos los países (...) Habría que hacer un llamado de atención y pensar que el bloqueo al país afecta a nuestro pueblo, especialmente a los de escasos recursos", manifestó.
Recordó que el 80 por ciento de los hondureños vive en estado de pobreza y requieren el respaldo y el apoyo que se ha estado brindando de parte de otros países. "Necesitamos el respaldo de los otros países, somos un país en desarrollo y necesitamos su ayuda para los planes y proyectos con los que ayudamos a sectores pobres" del país.
Dijo sentirse angustiada como mujer, de que en su país no hay libertades gracias al régimen de facto hondureño. "Nos sentimos frustradas, no hemos tenido libertad para desenvolvernos. Ahora con estos acontecimientos tenemos temor de que en cualquier momento nos puedan reprimir (...) Necesitamos cordura, no sólo para las personas (de) bien sino para el mismo país. Debemos unir esfuerzos, buscar soluciones y abrir espacios para buscar en conjunto la paz".
Como mensaje final para el pueblo hondureño, Xiomara de Zelaya esperó que regrese "la paz en el país, que se respete la voluntad del pueblo, que se respete cuando se elige a un Presidente durante cuatro años, la voluntad del pueblo que quiere que concluya el periodo el presidente Manuel Zelaya. Yo confío que en que regresará a Honduras".
En entrevista exclusiva para teleSUR, la esposa de Zelaya recordó que "a través de mi persona se logró, a través de la confianza que puse sobre él, eso hizo que el presidente (Zelaya) se confiara y que ahora esté en esta situación. Me siento responsable" por lo sucedido.
La primera dama hondureña relató que el sábado previo al golpe de Estado y a la consulta por la cuarta urna, recibió una llamada del general Vásquez Velásquez, quien le dijo que no se preocupara y que todo estaba controlado por las Fuerzas Armadas.
"Me dijo que le manifestara al Presidente que ellos estaban esperando que el llegara al Estado Mayor y que se tomara un café con ellos. Esto me confió y le traslade el mensaje a Manuel. No sé no se si tal vez esa confianza que le di sea lo que haya hecho confiar al Presidente", apuntó.
Recordó que en pocas horas, este mismo hombre de confianza, ordenó que allanaran su casa con balas. "Me siento engañada y mi familia también, porque a través de sus mensajes había tranquilidad de parte de ellos. Nunca pensamos que iban a hacer esto", exclamó.
"En en el tiempo que estuvo como Jefe (del Estado Mayor Conjunto) yo tenía un concepto positivo de su persona, pensé que era leal y que estaba acompañando al presidente. Luego me sorprendieron los sucesos, la actitud que adoptó", al dar la orden de secuestrar a Zelaya y sacarlo del país.
Refiriéndose al general Vásquez, Xiomara de Zelaya expresó: "Así como como él en su momento reconoció a Manuel como su comandante, que de la misma forma se acepte, que el Ejército vea en él al Presidente Constitucional de la República y que si su actuación va en base a la Constitución, asuma el puesto que le toca y permita que la situación del país vuelva a la normalidad".
Por otro lado, dijo que con esta espera de 72 horas propuesta por la Organización de Estados Americanos (OEA), queda reflejada la tolerancia de Zelaya, "porque él está buscando su retorno en paz. El deseo de él no es entrar a la fuerza sino cumplir las normas que se han ido estableciendo. Hemos ido agotando la parte diplomática ante este régimen dictatorial militar que ha dado un golpe certero al pueblo hondureño".
Agregó que es triste que un grupo de hondureños que han tomado posiciones importantes no sólo en los partidos que reprsentan sino en el país, sean los que están demostrando su intransigencia para impedir que haya pronto un retorno al orden constitucional en Honduras.
"Creo que no debemos perder la esperanza debe llegar ese momento donde (los golpistas) reflexionen y dejar atrás los intereses particulares y pensar en interes de todos los hondureños", enfatizó.
La primera dama hondureña indicó que la Constitución de ese país reza que ningún hondureño puede ser expatriado. "Entonces creemos que la presencia de Manuel Zelaya, el respaldo del pueblo hondureño que lo ha manifestado en marchas, tomas de carreteras desde todos los rincones del país, ese respaldo (...) es loque va a permitir que vuelva la calma y la paz".
Bloqueo económico afecta a hondureños
En otro orden de ideas, la esposa del presidente legítimo de Honduras, Manuel Zelaya, reveló que los hondureños se están viendo gravemente afectados por el bloqueo económico internacional impuesto por Estados Unidos o la Unión Europea (UE), que no reconocen al gobierno de facto instalado por Micheletti.
"Creo que Estados Unidos es un aliado importante, así como la presión de todos los países (...) Habría que hacer un llamado de atención y pensar que el bloqueo al país afecta a nuestro pueblo, especialmente a los de escasos recursos", manifestó.
Recordó que el 80 por ciento de los hondureños vive en estado de pobreza y requieren el respaldo y el apoyo que se ha estado brindando de parte de otros países. "Necesitamos el respaldo de los otros países, somos un país en desarrollo y necesitamos su ayuda para los planes y proyectos con los que ayudamos a sectores pobres" del país.
Dijo sentirse angustiada como mujer, de que en su país no hay libertades gracias al régimen de facto hondureño. "Nos sentimos frustradas, no hemos tenido libertad para desenvolvernos. Ahora con estos acontecimientos tenemos temor de que en cualquier momento nos puedan reprimir (...) Necesitamos cordura, no sólo para las personas (de) bien sino para el mismo país. Debemos unir esfuerzos, buscar soluciones y abrir espacios para buscar en conjunto la paz".
Como mensaje final para el pueblo hondureño, Xiomara de Zelaya esperó que regrese "la paz en el país, que se respete la voluntad del pueblo, que se respete cuando se elige a un Presidente durante cuatro años, la voluntad del pueblo que quiere que concluya el periodo el presidente Manuel Zelaya. Yo confío que en que regresará a Honduras".
teleSUR / ff - MM