Mientras los ebuleños posesionados de los bajos del Palacio de Gobierno exigieron que se castigue a Guadalupe Beltrán Acosta, por pretender ser una terrateniente en San Antonio Ebulá, el gobernador del Estado informó que se sigue negociando con ellos para llegar a un acuerdo satisfactorio.
Jorge Carlos Hurtado Valdez dijo que el Gobierno del Estado hizo una propuesta a los ebuleños, ofreciéndoles terrenos para su reubicación, aunque no se han podido satisfacer sus necesidades.
Expresó que su administración está dispuesta a terminar con esta situación, “que afecta tanto a estas personas como a los propietarios de los terrenos, pero estamos dispuestos, no hemos dejado de dialogar ni de hacer gestiones ante las partes involucradas, para que se pueda llegar a un arreglo satisfactorio”.
Por su parte, los ebuleños señalaron que a la lideresa Guadalupe de la Candelaria Beltrán Acosta no la tocan, a pesar de que posee un rancho en los mismos terrenos que pelea la familia Escalante.
Indicaron que ella junto con sus hijos pretenden ser los terratenientes, tomando para sí las mejores parcelas, solapados por las autoridades que les tienen miedo y les permiten toda clase de invasiones.
Los ebuleños señalaron que a pesar de las ofertas del gobierno, regresarán a sus tierras donde han vivido desde 1968, estando dispuestos a defender con la vida lo que consideran su patrimonio.
Mientras tanto, seguirán viviendo en los bajos del Palacio de Gobierno, al que ya se acostumbraron. (GK)
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Jorge Carlos Hurtado Valdez dijo que el Gobierno del Estado hizo una propuesta a los ebuleños, ofreciéndoles terrenos para su reubicación, aunque no se han podido satisfacer sus necesidades.
Expresó que su administración está dispuesta a terminar con esta situación, “que afecta tanto a estas personas como a los propietarios de los terrenos, pero estamos dispuestos, no hemos dejado de dialogar ni de hacer gestiones ante las partes involucradas, para que se pueda llegar a un arreglo satisfactorio”.
Por su parte, los ebuleños señalaron que a la lideresa Guadalupe de la Candelaria Beltrán Acosta no la tocan, a pesar de que posee un rancho en los mismos terrenos que pelea la familia Escalante.
Indicaron que ella junto con sus hijos pretenden ser los terratenientes, tomando para sí las mejores parcelas, solapados por las autoridades que les tienen miedo y les permiten toda clase de invasiones.
Los ebuleños señalaron que a pesar de las ofertas del gobierno, regresarán a sus tierras donde han vivido desde 1968, estando dispuestos a defender con la vida lo que consideran su patrimonio.
Mientras tanto, seguirán viviendo en los bajos del Palacio de Gobierno, al que ya se acostumbraron. (GK)