Notimex/San Diego
01 JUN 2010
El potosino Anastacio Hernández Rojas, de 42 años, murió anoche a consecuencia de un paro cardiaco, tras haber sufrido muerte cerebral por una golpiza propinada por agentes fronterizos de EUA.
La familia de Hernández Rojas dijo al consulado de México en San Diego que el migrante, padre de cinco hijos estadunidenses, entre ellos dos mellizos de cuatro años y quien había vivido en San Diego casi 27 años, murió cerca de las 9 PM.
Médicos del hospital Sharp de Chula Vista, California, habían declarado muerte cerebral el domingo al migrante, quien según versiones de testigos fue sometido por unos 20 oficiales fronterizos con golpes y descargas eléctricas. Nota completa en:
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