Mexicali, BC, 22 de diciembre. La Alianza de ex Braceros del Norte sostuvo que el gobierno federal mexicano entorpeció la entrega de 38 mil pesos a migrantes que trabajaron legalmente en Estados Unidos entre 1942 y 1964.
Representantes de ex trabajadores que hoy residen en Nevada, California, Washington y Colorado, así como en Baja California, criticaron el rechazo del gobierno de México a abrir sus consulados para instalar mesas receptoras de documentos y los pagos correspondientes por trámites. Además, se quejaron de que la matrícula consular expedida por las autoridades federales no se reconoce en Estados Unidos como documento oficial de identificación.
El dinero, que según los inconformes les retienen los gobiernos mexicano y estadunidense, corresponde a ahorros de varios años de trabajo como braceros en campos de Estados Unidos, de 1942 a 1964. “Además, a los intereses que generaron”, afirmaron Enriqueta Quintero y Rosa Martha Zárate.
Indicaron que por omisión de las autoridades mexicanas, decenas de personas de la tercera edad deberán viajar, en algunos casos, más de 30 horas por tierra a Mexicali, así como a otras ciudades de la frontera norte de México, desde el interior de Estados Unidos, pero “muchos no podrán acudir a la frontera norte a cobrar su dinero, porque carecen de documentos migratorios. Unos porque están muy enfermos y otros porque no pudieron completar los engorrosos trámites que exige el gobierno”.
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