AMLO en el Camino Real

De Campeche Opinión

Eudaldo CHAVEZ MOLINA

En emotivo acto que se efectuó en la Comisaría Ejidal, que lució un lleno y propició que muchos se quedaran afuera, el “presidente legítimo” Andrés Manuel López Obrador realizó la “Reunión informativa” en torno a la venta de Pemex por parte del espurio (Felipe Calderón).
En la Casa del Campesino reiteró el abandono en que la Federación mantiene al campo y la falta de oportunidades para los jóvenes en empleo y educación.
Acompañado de la diputada federal de Convergencia, Layda Sansores San Román, del diputado local Arturo Moo Cahuich, del dirigente estatal de Convergencia, Aníbal Ostoa Ortega, y de otros directivos del PT y PRD que integran el Frente Amplio Progresista, su visita se convirtió en una fiesta del pueblo.
Banderas color naranja, globos, pancartas, música y porras fueron el escenario de la entrada del líder, el único que ha sacudido la conciencia patriótica y nacionalista del pueblo mexicano para unir esfuerzos en la defensa del petróleo.
Aquí en Tenabo se encargó de darle la bienvenida el cronista vitalicio Eudaldo Chávez Molina, quien hizo una breve reseña de las luchas sociales de ese Municipio, remembró la valentía y dignidad de la etnia maya cuando, en 1847, hubo una rebelión indígena en Kankí para enfrentar a los pudientes y españoles que oprimían a los pobres peones.
Destacó las luchas libertarias de Tenabo para contribuir a la emancipación del Estado del Distrito de Yucatán, y dijo que como cronista vitalicio y ciudadano ratificaba su adhesión a este movimiento social, única opción para enfrentar a la mafia que se robó la Presidencia y ahora pretende robarse el petróleo para entregarlo a los extranjeros.
Exhortó al pueblo a sumarse a esta lucha social para rescatar a la patria, que se le desvanece entre la corrupción y la impunidad al ilegítimo Calderón, sin titubeos, con firmeza y decisión para que nadie nos robe la esperanza.
Pese al candente calor que se dejó sentir durante el mediodía y la tarde, el público aguantó estoico la llegada del “presidente legítimo” y escuchó atento el mensaje de optimismo.
Adultos y jóvenes se dieron cita para recepcionar al tabasqueño, que no cede en su objetivo de salvar al país del caos y la crispación social, en caso de que el espurio siga con su terquedad de entregar Pemex a los capitales extranjeros y condenar a nuestra patria a la pobreza y a la miseria.
Varios campesinos derramaron lágrimas al ver de cerca de quien encabeza este movimiento social sin precedentes, y ya en el escenario la legisladora federal Layda Sansores arrancó ovaciones y vivas, al reconocerle a Andrés Manuel López Obrador su valor en la toma de la tribuna legislativa, lo que impidió un albazo en la aprobación de la Reforma Energética de Calderón y forzó a la instauración de los foros.
El “presidente legítimo” dijo que la verdadera democracia es la que sabe escuchar al pueblo, lamentó el abandono del campo en el país y exigió que el ocupante de Los Pinos en vez de apoyar a los ricos y extranjeros ayude a los campesinos más pobres. Resumió el movimiento social en una frase: “Arriba los de abajo y abajo los privilegios, arriba los pobres”.
Señaló que la venta de Pemex representa un eslabón más de la condena privatizadora de las empresas y riqueza mexicana que ningún beneficio ha dejado a los mexicanos, y afirmó que es mentira decir que para modernizar Pemex necesitamos venderlo a los extranjeros porque no tenemos tecnología, lo que nos convertiría en esclavos en nuestra propia tierra.
Cabe destacar que es la primera vez que un “presidente legítimo” visita Tenabo, antes estuvo Salinas de Gortari, fruto de un fraude electoral.
En una hora inapropiada en que las escuelas efectuaban eventos de clausura y en un local donde el calor subió más de lo debido, Andrés Manuel López Obrador llamó a los tenabeños a la defensa del petróleo y a participar en la Consulta Popular a realizarse el 10 de agosto, para recibir la decisión y voluntad del pueblo.
Al término del evento los asistentes se arremolinaron a la salida para saludarlo, y López Obrador se mezcló entre la gente respondiendo a las muestras de afecto y firmando autógrafos en su libro titulado “La mafia nos robó la Presidencia”.
Y como ratificó en su intervención, aunque no les guste al IFE y a Calderón, el pueblo lo sigue llamando “presidente legítimo”.

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