lunes, 25 de agosto de 2008

La consulta en Jalisco si fue un éxito ::Ma. Candelaria Ochoa A.::

foto: Cesar Huerta

La consulta en Jalisco si fue un éxito

Ma. Candelaria Ochoa A.

Este 24 de agosto se realizó en Jalisco, la consulta para votar por el sí o no a la reforma de PEMEX, que en concreto es si o no a privatizarlo. Esta es la tercera fase y fue un éxito porque la gente acudió a las urnas que generalmente en las elecciones constitucionales no se encuentran ubicadas en esos lugares. Y fue un éxito por la grandeza y voluntad de mujeres y hombres quienes participaron de manera activa –tres o cuatro en promedio por mesa- para anotarse en las listas y ubicar una mesa de consulta en donde consideraba que era importante por alguna plaza o municipio del estado. Fue un éxito porque la jornada propiamente dicha no es fácil, se abre a las ocho de la mañana y se cierra a las seis de la tarde en que además de montar las urnas, contar las boletas, solicitar y verificar la credencial para votar, entintar el dedo, realizar el recuento de votos final y trasladar la papelería y el acta hasta donde se le solicitaba. Para eso, tuvieron que permanecer en sus lugares. Y fue un éxito porque la lluvia no les asustó, sino hasta que ya no tuvieron opción y cerraron una hora antes de lo previsto por el aguacero.

Las mesas de consulta estaban por todos lados: plazas principales, tianguis, kioskos, portales o simplemente en las banquetas y fue un éxito porque en promedio votaron 117 personas por mesa, aunque hubo algunas que llegaron a los 400 votos y otras con menos, la gente se interesó por acudir a expresar su opinión. A nadie y eso lo vi y lo pregunté, a nadie, absolutamente nadie fue obligado a votar por la opción del no y casi el 90% por cierto lo hicieron, a pesar de que las preguntas eran complejas.

Las personas que votaron en la mesa de la Glorieta de la Colonia Chapalita en Guadalajara, votaron muy parecido a las otras mesas ubicadas en el municipio más alejado, ganó el no a la privatización.

Jalisco siempre se ha considerado un estado conservador y apático y quizá una buena cantidad de personas lo sean, pero lo cierto es que ahora, esos apáticos llegaron a la mesa de consulta y preguntaban y sacaban su credencial para votar y votaban en secreto –alguno que otro no se escondió tras la mampara- y depositaba su voto en la urna. ¿Cómo es que sucede esto? si se tenía todo en contra para que la gente no estuviera enterada de qué significa la privatización de la iniciativa calderonista, si se la han pasado diciendo en la radio y la televisión, que se requiere construir refinerías y que por eso “urge” la reforma.

Esta no fue una elección constitucional y sin embargo, la gente creyó en ella, confió en las personas que le recibieron su voto.

Sí, también hubo personas a las que cinco minutos les parecieron mucho para opinar y decidieron no hacerlo, lo consideraron una pérdida de tiempo, ya que decían tener prisa.

Este ejercicio ciudadano es fundamental para una sociedad que se presuma democrática, lo deberíamos ejercitar más y hoy en Jalisco fue un éxito a pesar de tener en contra a un gobierno panista, que aunque está altamente descalificado para gobernarnos, sigue ahí, con una actitud altanera, autoritaria y déspota hacia sus gobernados; una consulta que no tuvo recursos económicos para difundirla en los medios masivos de comunicación, y una campaña masiva pagada por el gobierno federal para impulsar la “necesidad” de la reforma, ya que cada minuto desplegaban anuncios de manera incesante a favor de la privatización y todo porque en Texas se procesa la gasolina y aquí no tenemos refinerías.

Cierto, pero no nos dicen por qué allá se procesa la gasolina, ni tampoco el negocio que representa para unos cuantos que se procese allá y menos, el por qué no se han construido refinerías y no se ha invertido en la infraestructura de PEMEX. Tampoco nos dicen cómo es que el líder sindical desde hace casi treinta años, Carlos Romero Dechamps gana dinero para comprarse yates, casas lujosisímas y tener una oficina tan elegate como la de cualquier magnate neoyorquino. Y lo que menos nos dicen es que una buena cantidad de los programas sociales, la educación, la salud, la vivienda entre muchas otras, son financiadas por PEMEX. ¿Será que los empresarios “privados” dediquen sus ganancias multimillonarias a esos programas?

Alguien me decía el otro día, que estaba bien que los teléfonos se hayan privatizado, que porque así hay más competencia, ¿será? ¿Competencia entre quiénes? Porque hasta ahora, sólo tenemos grandes millonarios y pocos beneficiados. Sí hay una gran competencia, pero por las mayores ganancias de quienes utilizamos teléfono, porque pagamos tarifas muy caras en comparación con países desarrollados y el teléfono se ha extendido no sólo para comunicarnos, sino para ganar más. Se privatizaron y también tenemos las tarifas más caras que en países desarrollados.

¿Con quién tendremos competencia sobre el petróleo? ¿Será que lo que quieren es que quienes inviertan en él, paguen 60, 70 u 80% de impuestos? Si así es, no nos preocupemos, pero si no, desde ahora estamos en problemas. Porque además de que a PEMEX se le quita un porcentaje de impuestos que asciende hasta el 90%, con todo y ello, se financian los programas sociales.

Finalmente, hubo un debate en el Senado de la República y una consulta ciudadana y tenemos una disyuntiva: ¿quién gana y quién pierde con la privatización del petróleo? La gente sigue teniendo dudas y por eso salió a la calle y se acercó a las mesas de consulta y se pregunta todavía ¿quiénes ganen con la privatización….?