Andrés Gómez, famoso por su valentía al gritar espurio a Felipe Calderón, divide en dos partes iguales el Premio Nacional de la Juventud: al fondo de becas del Colegio de Ciencias y Humanidades de la UNAM y a la Asociación Mexicana Pro-Colegios Mundo Unidos
MEXICO, D.F., 7 de octubre (UNIVERSAL).- Andrés Gómez dividió opiniones hasta en el grupo de 19 ganadores del Premio Nacional de la Juventud. Algunos de sus 18 compañeros lo felicitaron por su valentía al increpar Felipe Calderón y otros de plano le dejaron de hablar cuando regresó del Juzgado Cívico 33 al hotel donde los 19 jóvenes más destacados del país se hospedaron el viernes pasado.
Seis días después dejó México para seguir sus estudios en Noruega.
El pasado viernes, Gómez gritó espurio a FeCal, durante el mensaje que daba a los jóvenes ganadores del Premio Nacional de Juventud.
En medio de fotografías y autógrafos que le pedía la gente en el aeropuerto. Se le acercaron varios, le preguntaron: “¿Eres tu?, oye muchas felicidades”, desde jóvenes hasta pilotos.
Se fue a las tres de la tarde y lo despidieron sus padres. Su mamá dice estar sorprendida, pues en este mismo aeropuerto, apenas hace unos días, recibió a su hijo de 18 años, quien siempre había sido apolítico e interesado de la ciencia desde que preguntaba a dónde se iba el humo del café caliente o el que descongelaba hielos y medía el tiempo que tardaban en hacerler pero hoy despidió a un joven que “por su pasión a la ética más que a a política” se había hecho famoso en los medios de comunicación, sobre todo en internet.
Se marchó dejando en claro a todos aquellos que lo criticaron por recibir un premio de quien tanto criticaba que el premio no se lo queda él, pues lo donó al fondo de becas de la Colegio de Ciencias y Humanidades de la UNAM y a la Asociación Mexicana Pro-Colegios Mundo Unidos.
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