Tal como fue definida la mafia del crimen el pasado 24 de marzo por Felipe Calderón (“bola de maleantes que son una ridícula minoría montada sobre el miedo, la corrupción o la cobardía de muchos, durante mucho tiempo”), debemos concluir que el país está poblado y dominado por minorías ridículas, siendo éste su principal problema.
Por ejemplo, “minoría ridícula” o absurda es el 10 por ciento de la población que concentra 78 por ciento del ingreso del país, frente a la consistente mayoría de mexicanos que vive en algún grado de pobreza (53 por ciento de la población). Es una élite social montada sobre la ineficaz estructura de un Estado que ha propiciado la concentración de la riqueza, pero no su distribución. |