Declara consejero Alfredo Figueroa que con esta la resolución se da fin a una etapa; asegura que debe abrirse un debate en torno al artículo 134 Constitucional
El Universal
Ciudad de México Lunes 22 de diciembre de 2008
16:50 En un auténtico fast track, el pleno del Consejo General del Instituto Federal Electoral (IFE) desechó esta tarde 374 quejas y denuncias generadas -en su mayoría- durante la polémica elección presidencial del 2006.
El consejero electoral Alfredo Figueroa declaró que con esto, se está "ante el fin de una etapa" del IFE, "estamos, en realidad, cerrando un periodo que ha tenido diversos adjetivos en la vida contemporánea política de México que hoy llega a un término".
De esta forma, dijo, se resuelven de manera general, las disputas que originó no sólo el 2006, sino los antecedentes de aquel 2006. Ahora, esta nueva etapa, dijo, debe iniciarse abriendo un debate serio y responsable respecto al artículo 134 Constitucional.
El consejero Virgilio Andrade, lo catalogó a su vez como "un ejercicio histórico" al resolverse el mayor número de casos. "Es garantía legal no tener un cúmulo de pendientes en materia administrativa legal", sentenció.
De esta forma, dijo, se resuelve el mayor número de casos y denuncias en la historia del Instituto Federal Electoral. De 779 quejas presentadas en 2006, sólo quedan 4 denuncias pendientes por resolver.
En el 2007 se presentaron 47 quejas; con la resolución adoptada hoy por el Consejo General, sólo quedarían 10 y del 2008, de 200 quejas presentadas, quedarían por resolverse 56, resumió Virgilio Andrade.
En suma, el número de proyectos pendientes pasará, de cerca de 500 en septiembre del 2008, a 70 en su totalidad. La mayor parte de las quejas que quedan pendientes fueron presentadas por ciudadanos y tienen qué ver con Agrupaciones Políticas.
Figueroa aclaró que de este paquete de 374 quejas, hay un sinnúmero de "desechamientos" relativos al 134 constitucional.
Esto, "porque los magistrados (electorales) han establecido una jurisprudencia que implica un sinnumero de condiciones para poder entrar al fondo de los asuntos relacionados con la propaganda de los servidores públicos.
Toca a al IFE iniciar un debate serio sobre las implicaciones que en materia electoral sobre actos futuros de los funcionarios públicos, ya que la propaganda institucional sí tendrá un impacto, advirtió.
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