Rolando Cordera Campos
La industria se encogió en el último trimestre de 2008 en 6 por ciento y algunos analistas esperan que el próximo abril registre una caída espectacular de 13 por ciento. Para el año en su conjunto, se teme que la contracción industrial esté entre -4.8 y -6 por ciento. Las exportaciones automotrices se despeñaron este enero 59 por ciento y la producción 28 por ciento. De acuerdo con La Jornada, Banamex precisa: “La contracción de la actividad económica en enero fue más profunda que lo previsto. La principal fuente de deterioro sigue siendo la industria manufacturera… en el cuarto trimestre de 2008 las exportaciones manufactureras de México cayeron a una tasa anual de 8 por ciento… Sin embargo, el deterioro parece mayor por lo menos al inicio de 2009, dado que la demanda externa implicó en enero severas caídas de las exportaciones de vehículos tanto pesados como ligeros, de 57 y 67 por ciento, respectivamente” (LJ, 18/02/09 p. 25).
Caídas libres en casi todos los planos de la actividad económica: en los servicios, fuente principal de empleo en el México antindustrial que nos legó el cambio estructural, se registra una caída anual en noviembre de 2008 de 1.8 por ciento, mientras este enero se perdieron 128 mil 122 empleos en el mercado formal. La espiral hacia abajo se retroalimenta sin misericordia, porque cada punto de crecimiento que se pierde y se vuelve negativo significa cientos de miles de empleos que no se crean y se esfuman, lo que afecta al consumo, de por sí acosado por la falta de crédito, angosta el mercado y desalienta la inversión, que tampoco encuentra financiamiento.
Leer Nota AQUI