En 48 horas se cumplen dos meses de la tragedia en Hermosillo. Luchemos por que no sea otro San Juanico. Los 49 niños muertos son nuestros hijos y su muerte la nuestra. El futuro de México ardió por la desidia y la impunidad.
El sistema pretende que el robo, la desgracia y la catástrofe de hoy escondan las de ayer.
No basta con querer cambiar las cosas, éstas cambian cuando se pone un hasta aquí. Hermosillo es el hasta aquí de una manera de vivir en México, la más cruel muestra del fracaso político que evidencia cómo nuestros hijos pueden morir, y que además su muerte se consigne como un accidente y no como un infanticidio.
Si aceptamos que fue accidente mataremos de nuevo a los 49 niños. En cualquier parte del país más niños pueden sufrir la misma suerte. Si llegó un momento en que se debe decir ¡nunca más!, es a partir de Hermosillo.
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El sistema pretende que el robo, la desgracia y la catástrofe de hoy escondan las de ayer.
No basta con querer cambiar las cosas, éstas cambian cuando se pone un hasta aquí. Hermosillo es el hasta aquí de una manera de vivir en México, la más cruel muestra del fracaso político que evidencia cómo nuestros hijos pueden morir, y que además su muerte se consigne como un accidente y no como un infanticidio.
Si aceptamos que fue accidente mataremos de nuevo a los 49 niños. En cualquier parte del país más niños pueden sufrir la misma suerte. Si llegó un momento en que se debe decir ¡nunca más!, es a partir de Hermosillo.