Rechaza el Gobierno Legítimo el cierre del único hospital psiquiátrico del
país y se solidariza con familiares de pacientes y planta laboral del
nosocomio: Laurell
* Se manifiesta en contra de cualquier intento de desalojo del nosocomio,
con el apoyo de la fuerza pública
* Con señalamientos generales se responde a peticiones de familiares de
enfermos sobre un proyecto de remodelación, afirma
* Estamos ante un caso más de criminalización de la opinión disidente,
puntualiza la secretaria de Salud
La salud mental y la psiquiatría es una de las áreas más desatendidas del
sistema público de salud en México, a pesar de que las enfermedades
mentales representan una problemática muy frecuente en la población y el
Hospital Juan N. Navarro es el único hospital psiquiátrico infantil del
país, pero desde el sexenio pasado se ha intentado cerrarlo con la promesa
de abrir otro con mejores instalaciones y equipamiento, manifestó la
secretaria de Salud, Asa Cristina Laurell.
Mencionó que la Secretaría de Salud del gobierno usurpador ha informado
que utilizará el terreno donde está el citado nosocomio –ubicado en la
delegación Tlalpan— para ampliar el Instituto Nacional de Cancerología y
construir un estacionamiento.
La referida dependencia ofrece trasladar el hospital Juan N. Navarro a un
inmueble anteriormente utilizado por la Secretaría de Educación Pública
que sería remodelado, pero es obvio que las instalaciones de la SEP no
cumplen con las condiciones adecuadas para funcionar como centro
terapéutico y hospital psiquiátrico, ya que existen normas precisas al
respecto, aseguró.
Con dicho antecedente, alertó, se pondría incluso en peligro la vida de
los pacientes, por la falta de instalaciones adecuadas.
Ante la insistencia de familiares de los pacientes y el personal del
hospital de conocer el proyecto detallado de remodelación de estas
instalaciones, la Secretaría de Salud sólo ha respondido con señalamientos
generales, aclaró.
“Si la Secretaría tuviera la disposición de mejorar la atención a los
niños y adolescentes con problemas psiquiátricos ha tenido mucho tiempo
para hacerlo”, estimó al resaltar que “existen razones para pensar que el
cierre del hospital es un paso más en la adopción de una política de salud
mental donde los medicamentos sustituyen a la terapia y las familias
suplan al cuidado institucional cuando éste sea necesario”.
Hizo énfasis en que los pacientes psiquiátricos son un grupo vulnerable en
la sociedad y debe ser responsabilidad de la autoridad proporcionarles la
terapia que requieren.
Todos los mexicanos tenemos derecho a la protección de nuestra salud. Así
lo establece la Constitución y “habría que recordar que el riesgo de vida
de un paciente psiquiátrico puede ser igualmente grande que de un paciente
con cáncer”, puntualizó.
Después de meses de cerrazón, denunció, la Secretaría de Salud pretende
ahora desalojar el hospital usando la fuerza pública y amenazando a los
familiares de los pacientes y a los trabajadores que están defendiendo
este centro de terapia psiquiátrico.
“Estamos ante un caso más de criminalización de la opinión disidente, de
los “otros”. Se agrava este hecho porque se trata de un grupo que desde
antes está discriminado”, acusó.
Asa Cristina Laurell dio a conocer que el Gobierno Legítimo se solidariza
con los defensores del hospital Juan N. Navarro y exige que se cumpla el
derecho a la protección de la salud de sus pacientes