jueves, 15 de enero de 2009

LA FUTURA SECRETARIA DE ESTADO NORTEAMERICANA FIJA SU POSTURA POLITICA SOBRE MEXICO.


Dr. Francisco J. Andrade

Enero de 2009.

La Senadora Hillary Clinton declaró el 13 de enero por escrito al Comité de Relaciones Exteriores del Senado de Estados Unidos, su posición política y por extensión la del Presidente Electo Obama, frente a los retos mundiales que su País enfrenta.

Una lectura completa de la declaración escrita de la Senadora, revela que cumple con todas las condiciones que se esperarían de un político responsable: Estados Unidos tiene intereses y no amigos. Así entendida su posición, invita a reflexiones de respuestas inteligentes, que deben ser concebidas por los mejores intelectos políticos de México.

Pero antes de seguir, debo declarar específicamente mis fuentes de construcción de este comentario para los netescuchas, mismas que se encuentran al pie de página de este escrito que podrá leerse en la página de Radio Amlo, columnas. Concretamente, encontrarán la referencia a Max Weber en el tema de la Política como Vocación, que es el metro con el que he medido el documento de la Senadora Clinton.

Con toda claridad la Senadora indica al Mundo que las prioridades del Presidente electo Obama serán la seguridad de su país, sus intereses y sus valores morales. Como el estado tiene su razón de existir en base al uso de la fuerza, la Senadora enseña en forma inequívoca que dado que ellos la tienen, estarán dispuestos a usarla para conservar su liderazgo e inclusive procurarán ampliarlo. Sobre este tema político, universalmente aceptado, no cabe la menor duda y Hillary Clinton lo expresó con elocuencia perfecta, ya que dijo: “Siempre, y especialmente en estos días de tribulación y de desafíos globales, nuestro deber esencial es el de proteger y mejorar la seguridad de los Estados Unidos, sus intereses y sus valores”.

En este Mundo interdependiente y globalizado, las reglas cambian y la distancia y la falta de información ya no son obstáculos para el conocimiento y la influencia positiva o negativa que se derivan de las acciones en un país dado. La Senadora reconoce estos hechos como una influencia real que no puede soslayarse y en cuyo entendimiento los americanos han invertido para poder mantener su influencia en las nuevas situaciones derivadas del fenómeno internet y de la revolución en el transporte y el avance científico.

En una reiteración de su posición, declara que su política exterior debe basarse en la conjunción de principios y pragmatismo. Nuevamente, la base de sus decisiones será el dominio político de los demás a través de la fuerza. En este aspecto no hay concesiones y así ha sido siempre. Pero España estaba a tres o más meses de distancia. Y no nos hagamos ilusiones.

La Senadora cita como un complemento de su política el papel que tienen asignadas las Naciones Unidas porque naturalmente el poder no se comparte.

Para confirmar su pensamiento político debo citar uno de los párrafos sobresalientes, “al frente va la diplomacia, porque este es el procedimiento inteligente. Pero también sabemos que la fuerza será a veces necesaria y nos apoyaremos en ella para proteger a nuestra población y nuestros intereses donde y cuando se necesite como último recurso.” Esta claro que la diplomacia hablará primero, porque sabe lo que son sus alas.

Señala sin titubeos que la alianza básica es con Europa porque: “Cuando Estados Unidos y Europa trabajan juntos, los objetivos globales están a nuestro alcance.” No hay duda al respecto, las alianzas preferidas son con Europa. La prioridad norteamericana se centra en un entendimiento con los europeos y ese es un dato para nuestro conocimiento y acomodo.

Con elegancia verbal nos dice que “...tenemos una necesidad crítica de trabajar más cercanamente con Canadá nuestro mayor socio comercial y con México que es el tercero. Canadá y México son también nuestras más grandes fuentes de energía de importación. Debemos profundizar nuestra sociedad con México para resolver los problemas comunes derivados del tráfico de drogas y los desafíos en nuestras fronteras..”

Tomémosle la palabra, como proveedores de energía y socios comerciales tenemos también intereses que queremos plantear: primero: el relativo a la generación de energía nuclear por fisión y más fuertemente, debemos participar en la generación de las invenciones y aprovechamiento dentro de cincuenta años de la energía por fusión.

Al respecto, y en conjunción con la venta de petróleo crudo a nuestros socios del norte, debemos consultar con nuestros científicos y con otros donde estén, para aumentar en 10 o 15 años, el número de plantas nucleoeléctricas de fisión y negociar con nuestro socio americano la participación en ITER (el camino), para desarrollar un proyecto y demostrar la factibilidad cientifica y técnica de la fusión nuclear que puede ser el camino correcto para las generaciones que nos sucedan en los próximos cincuenta años. Entrar a ese club del ITER, requiere que tengamos los recursos y la masa de inteligencia que nos permita su aprovechamiento. Nuestros físicos y matemáticos saben esto y saben también que el boleto de entrada es muy caro y no hay seguridad de éxito. Actualmente el proyecto se desarrolla en el Sur de Francia y participan en él la Unión Europea, Japón, China Grande, India, Corea, Rusia y Estados Unidos. Esta es una gran oportunidad de demostrar nuestras habilidades diplomáticas.

Los planteamientos respecto al tráfico de drogas, ya han avanzado y la ayuda que nos proporcionan, viene fuertemente ligada al control político de México vía la tecnología para el control del tráfico de las drogas. En lo posible, habría que diversificar la tecnología con material de otros países de ser posible y de manera cuidadosa plantearles a los americanos la necesidad de que nosotros hagamos nuestras propias inversiones en este escabroso asunto.

En cuanto a los desafíos en la frontera, derivados del flujo de trabajadores indocumentados, no podemos sostener la ficción de que no los vemos. Tendremos que poner en acción a las mejores mentes para que generen mecanismos humanitarios que salvaguarden su integridad física y desarrollar acciones coordinadas con los americanos para una migración ordenada que no ofenda nuestra dignidad política.

(expuesto el día de hoy en el programa de nuestra compañera mali)