Martí Batres Guadarrama
Objeciones de la Memoria
De 2000 a 2004 la burocracia de alto nivel en el gobierno federal creció de manera desproporcionada; de 2006 a la fecha la situación en nada ha variado. Veamos cómo algunos siguen despachándose con la cuchara grande y se oponen sistemáticamente a reducir sus salarios. Con Fox fueron creadas 18 mil plazas de confianza, todas con salarios superiores a 100 mil pesos.
Diputados de oposición en la LVIII legislatura dieron números escalofriantes sobre la plantilla de los altos mandos del gobierno federal. Trabajan alrededor de 60 mil mandos; 4 mil 600 son mandos superiores y 54 mil 500 mandos medios. Hay 25 mil 500 jefes de departamento, 20 mil subdirectores de área, 8 mil 813 directores de área, 2 mil 288 directores generales adjuntos, mil 743 directores generales, 376 jefes de unidad superiores y 172 subsecretarios.
Aunque existan estas últimas plazas, todos sabemos que no hay, por ejemplo, 172 subsecretarios pero alguien cobra como si lo fuera.
Según tabuladores oficiales, un secretario de Estado gana poco más de 152 mil pesos mensuales, un director general adjunto (plazas que han aumentado con singular alegría, hasta superar las 400) cobra 125 mil pesos y un director de área “apenas” 95 mil pesos mensuales. ¡Vaya austeridad!
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