TRIBUNA C A M P E C H E
Primera Plana
No dejan rescatar San José Carpizo a los campesinos
SAN JOSE CARPIZO, Champotón.— Con la presunta complicidad del delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Luis Fernando Alvarez Aguilar, inversionistas, al parecer de origen extranjero, se están apoderando de las casonas y los edificios de esta ex hacienda, denunciaron los ex comisarios Alberto y Francisca Casanova Farfán y Ernesto Pech.
El comisario municipal, Manuel Casanova Estrella, está en contubernio con el delegado del INAH y con uno de los compradores, de quien sólo se sabe que se llama o apellida “Patrick” o Patricio, a quien nadie ha visto, pero quien ya adquirió dos edificios y tres casas, que pagó en efectivo, dinero que fue repartido entre algunos ejidatarios para que se presten a validar este saqueo y no generen escándalos.
“La ex hacienda o finca San José Carpizo, que fue edificada hace más de un siglo, al parecer en 1904, cuenta con la iglesia que tiene un atrio de madera, en cuyo altar mayor está el patrono San José, que es una efigie de mármol. Las bardas son una verdadera fortaleza, también está la casa principal, la bodega de almacenaje, el trapiche, la tienda de raya y 80 casas donde vivían los trabajadores. Era una gran hacienda de los Eloy Xacur, pero los edificios están siendo vendidos sin que nadie haga nada”, señalaron.
Los ex comisarios dijeron que durante varios años han venido solicitando al INAH que les permita trabajar en el rescate de los edificios más antiguos para tratar de reconstruirlos, y que el lugar siga siendo un atractivo turístico, “pero no nos dejaron tocarle ni una teja”.
“El delegado del INAH, Luis Fernando Alvarez Aguilar, ni siquiera ha querido escucharnos y mucho menos va a proceder a investigar las denuncias. Por eso presumimos que está en contubernio”.
No permite que la comunidad participe en el rescate de este patrimonio, ni aporta recursos federales, para que con especialistas y expertos se realice ese trabajo, lo que nos demuestra que simple y sencillamente, no tiene deseos de ayudar.
A pesar de que el lugar se encuentra en el abandono, continúan llegando algunos turistas, tanto nacionales como extranjeros, lo que significa que si se trabajara adecuadamente, se generaría una importante fuente de ingresos para los pobladores.
“Pero siempre nos dijeron que no podíamos tocar nada, que el lugar era propiedad de la nación, y que sería rescatado más adelante, aunque nunca se hizo nada y ahora que entró como comisario Manuel Casanova Estrella, en complicidad con el delegado del INAH comenzaron a vender los predios a un empresario que dice ser de Campeche.
Para que nadie diga nada y estén callados, se repartió parte del dinero por venta de los edificios, a algunos ejidatarios, según él, por instrucciones del delegado del (INAH). Así pretenden que su crimen no sea del conocimiento de la sociedad campechana.
Revelaron que ya interpusieron su denuncia ante el INAH, pero consideran difícil que proceda, ya que el propio Alvarez Aguilar tiene intereses en el asunto. Por eso, dijeron, analizan la posibilidad de recurrir a otras instancias, y propiamente con el jefe de Alvarez Aguilar, Alfonso de Maria y Campos, al que le expondrán las irregularidades.
“No podemos permitir que ante la complacencia de las autoridades del INAH, el señor Patrick o Patricio siga adquiriendo las casas en 400, 80 mil y 40 mil pesos, ya que el daño se hace al patrimonio nacional, pero sobre todo al patrimonio cultural de los pobladores”, indicaron.
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