A las organizaciones sindicales y populares
A los periodistas comprometidos con la lucha del pueblo
A los padres de familia
Lo que aparece en el fondo y a lo lejos, una vez que sea superado el contagio de la influenza humana en este país, es una profunda crisis y un mayor empobrecimiento de los mexicanos. Si en abril se estaban quedando sin empleo remunerado seis mil trabajadores cada día, ahora con el reconocimiento oficial de que el PIB cayó arriba del siete por ciento, esto se torna catastrófico para la economía popular.
La monumental crisis además de traer desempleo, está desencadenando mayor vulnerabilidad social que se traduce en familias peor nutridas, sin seguridad social, con mayores riesgos en caer en la delincuencia a falta de alimentos; en las escuelas, un mayor ausentismo y deserción escolar; ausencias en fábricas, dependencias públicas y privadas, pérdida de derechos laborales, miedo e inmovilidad social. Esto último parece ser el objetivo, se pretende que los trabajadores sumidos --la gran mayoría, en la miseria, se preocupen sólo por llevar el pan de cada día a casa y dejen a un lado sus derechos de organización, movilización y conquista de sus reivindicaciones.
La mayoría de los medios impresos y electrónicos parece que han establecido una “santa alianza”, para mantener a un buen nivel la zozobra, el miedo y la desesperanza de los trabajadores, pretextando la influenza, se presiona con todo y a todos a no salir a la calle y menos si es para expresar sus justos reclamos; a los profesores con la mano en la cintura se les pretende ampliar el ciclo escolar hasta el 14 de julio, cuando la suspensión no la provocamos nosotros y en la mayoría de las escuelas han estado al pendiente de su regreso y por supuesto algunos días realizando profilaxis higiénica junto con los padres de familia , aún sin los recursos que el gobierno federal y estatal prometió.
Por si la crisis capitalista y la influenza no fueran suficientes para acallar las voces de quienes protestan, está la millonada de pesos en las cuentas bancarias de cada uno de los partidos para inundar durante mayo y junio de imágenes, saliva y promesas el ambiente social y político ante su incapacidad de comprometerse con las luchas del pueblo, por trabajo bien remunerado, libre organización sindical, vivienda accesible y decorosa, seguridad social universal, educación para todo el pueblo, respeto a la libre autodeterminación de los pueblos indígenas, cese al despojo de tierras, agua y los recursos naturales, entre otras demandas.
Así, los efectos de la crisis económica, la influenza y las campañas electorales en lugar de servir como resortes que impulsen al pueblo a luchar, se convierten en mecanismos de control social del Estado.
En tanto tratan de ceñir a un cuasi estado de sitio a los trabajadores, se siguen presentando en todo el país casos de represión a defensores ambientales, asesinatos de luchadores sociales y periodistas, despojo de tierras comunales, crucifixión de quienes tienen opiniones críticas, bajísimos salarios y despidos masivos de trabajadores: mineros, obreros fabriles y de la construcción, periodistas y jornaleros agrícolas, por citar algunos.
Es por ello que aún en las peores circunstancias, los trabajadores no podemos renunciar a nuestro legítimo derecho de organizarnos para luchar. El aceptarlo, significa una pérdida histórica ganada con una alta cuota de sangre. Dejarles todo el lugar a los patrones y quienes les sirven sin condiciones, es aceptar como bueno todo lo que venga de éstos, cuando su principal fuente de riqueza, su fortaleza central, es la explotación de nuestra fuerza de trabajo.
Llamamos a las organizaciones de trabajadores y sus dirigentes a desplegar toda su imaginación, capacidad, entrega y energía para que aún en las peores circunstancias, permanezcamos unidos y luchando.
Los trabajadores de la educación, por encima de la voluntad de Elba Esther Gordillo Morales y sus incondicionales, nos movilizaremos en todo el país en el marco de la jornada de lucha de mayo y junio, tanto en las capitales y ciudades medias, como en la capital de la república. Los ejes de la jornada son: a) no a la contra reforma educativa, en defensa de la educación pública, b) abrogación de la Ley del ISSSTE, c) cancelación de la ACE, d) por la solución pronta y justa de las demandas de todo el pueblo.
El 15 de mayo “Día del Maestro”, la marcha nacional partirá de la Normal Superior hacia la Secretaría de Gobernación a las 9:00 horas.
Movimiento de Bases Magisteriales
Guadalajara, Jalisco 11 de mayo de 2009
Contra el charrismo sindical ¡hasta vencer!
Moisés Guerrero / Arturo Contreras / Esteban Martínez / Javier Villalvazo / Heriberto Bueno / Oscar Morales / María Refugio Peña / Alberto Pintor