México SA
Partidos ricos, pobres resultados
Impunidad
Carlos Fernández-Vega
En este año de crisis, por muy externa que sea (Calderón dixit), y en el que el dinero escasea, según la versión oficial, resulta alentador conocer que el aparato político-electoral (que incluye al IFE, Trife, FEPADE y los partidos políticos con registro) cuesta a los mexicanos cerca de 50 millones de pesos por día, sin que a cambio reciban prácticamente nada. A lo largo de este agitado 2009, pues, estas agrupaciones se comerán una nada despreciable canasta de recursos públicos cercana a 18 mil millones de pesos, sin considerar lo que esos mismos partidos se engullen en el Congreso.
El costo del financiamiento público de ese aparato político-electoral sería más que justificable, si a cambio ofreciera a los mexicanos, cada integrante en su ámbito de responsabilidad, resultados tangibles, garantías en el cumplimiento de la ley, acciones concretas en contra de quienes la violan, avance económico y social, mejoría en el nivel de vida, candidatos que en los hechos respondan a las necesidades y urgencias de la ciudadanía y no a los intereses de grupo, y, en fin, que sirviera al país.
Leer Not AQUI