

En la foto, dos bestias sionistas detienen al camarógrafo de "Reuters" Yusri al-Jamal –vestido con pantalón blue-jean–, le arrebatan la cámara de vídeo y proceden a destrozarla, arrojándola al piso. Con la finalidad de reducir la existencia de pruebas documentales respecto al genocidio palestino, los criminales sionistas no permiten la presencia de periodistas en los territorios palestinos.