martes, 5 de mayo de 2009

" EL MIEDO... O EL SINDROME DEL AVESTRUZ"...



¿Eres de las personas que han tenido que cambiar su vida por el miedo?...
Tal vez has sufrido por años el miedo intenso a viajar en avión, el cual sin duda te ha limitado y te ha impedido disfrutar de viajes de placer o de negocios.
¿Has sentido y vivido el miedo a perder la vida?
Cuando nacemos, somos como una computadora nueva, que viene con todos los accesorios necesarios para funcionar, incluyendo, un programa inicial, que permitirá desempeñar las funciones que, programas posteriores, a el niño se le enseñen a ejecutar.

Así somos Al nacer, nuestro organismo vino listo para funcionar, y tenía un programa inicial que nos ayudó a percibir el mundo a través de los sentidos y aprender un sin fin de cosas, entre las cuales se encontraba, por supuesto, el temor.

Así es, el miedo es algo que se aprende. No viene con nosotros al nacer, lo vamos aprendiendo a través de experiencias y terceras personas. Es por eso, que los niños, frecuentemente se ponen en situaciones de peligro, que para nosotros resultan evidentes.
Este miedo, nos ayuda mucho, sobre todo en la etapa de la infancia, donde aprendimos que no debemos tocar los objetos calientes; que no debíamos confiar en la gente extraña de buenas a primeras, y otras cosas más. Nos ayudó para conservar nuestra vida y prevenir accidentes.
Pero curiosamente, es este mismo miedo, el que en el futuro se puede volver en nuestra contra, cuando no sabemos manejarlo. Al igual que una herramienta, puede servir tanto para ayudar como para dañar.
¡El miedo puede ser una herramienta para actuar con Prudencia!
Sabiendo manejar el miedo, podemos sacar gran provecho.
Muchos beneficios dejan de ser recibidos a causa del miedo, que desafortunadamente, impera en estos tiempos. Si el miedo oliera, seguramente, sería algo que estaría muy presente en el ambiente y a mi me parece que en estos momentos apesta.
Cuando el miedo crece más de lo necesario, dejamos de crecer como personas. Necesitamos comprender que es hora de empezar a controlar esta herramienta,
El miedo paraliza, inhibe, sirve para controlar cuando quien lo infunde lo utiliza con conocimiento de causa. El miedo puede ser adictivo, pues nuestro organismo segrega hormonas que nos ayudan a superarlo dejando en el proceso una sensación de placer cuando éste cesa. Sirve para someter a los débiles, a los acomplejados, a los que de alguna manera sienten que quien les infunde miedo les resulta un ser superior, pero también le sirve al fracasado como herramienta para tapar sus incapacidades.
El miedo, entonces, es el arma fundamental de los desalmados, es herramienta útil del ambicioso, del fracasado, del incapaz. Y resulta irónico que quien muchas veces lo provoca para su usufructo, también lo sufre irremediablemente.
Todo es cuestión de quien descifra primero la debilidad del otro. Es así que cuando logramos liberarnos del miedo subyugador, podemos llegar a experimentar sentimientos de rebeldía desmedida, de venganza, de acción a traición con efectos fatales para quienes lo utilizan como forma de sumisión. Es en este punto, que aquel que lo causa termina tan ensuciado y muerto de miedo como aquel al que se lo causaba.
Y es que estamos en la era del miedo, del que tenemos por la ambición imperial que irrespeta la vida humana, por las enfermedades infecto-contagiosas que limita nuestro pensamiento si lo dejamos hacer su labor, por la depravación de los delincuentes que asesinan para robar, por cometas desconocidos y muy lejanos que algún día se estrellaran contra la tierra. También es la era de los miedos "artificiales", aquellos producidos en las fabricas mediáticas.
El Miedo a Proveer Información lo que busca es que uno sea "irremplazable". Si nadie sabe lo que yo sé, si nadie puede prender "esa máquina", o tratar con "aquel cliente", o como evitar que determinado producto salga mal, o si yo soy el único que sabe la formula de tal producto, o como se procesa; y si el miedo impera en el clima organizacional, va a ser muy difícil que la gente sea proclive a transmitir lo que sabe, la "información que yo poseo y nadie más tiene, es mi “poder”, es lo que me da capacidad de negociación o de manipulación". Esta es una actitud sumamente negativa que los ejecutivos o políticos, en los niveles más altos de dirección suelen achacar al trabajador, pero que nace del clima organizacional que hemos propiciado. El miedo a proveer información se deriva del miedo al castigo y del temor al fracaso y lleva a encubrir información que podría ayudar a identificar y resolver problemas. También propicia la "fabricación de cifras" para satisfacer a la gerencia o al pueblo de una nación, lo que hace que esta se aleje del verdadero camino hacia el mejoramiento, aumentando la variación en los procesos y propiciando la manipulación, ya que sin data fidedigna, es muy difícil actuar en el sitio preciso y de la manera adecuada.
El Miedo al Cambio es el más limitante miedo en el mundo de hoy, donde el proceso de cambio se ha hecho tan vertiginoso. El miedo al cambio crea un ambiente donde no existe información clara y precisa, donde la gente está demasiado ocupada cuidando sus trabajos como para reportar claramente los problemas, fallas, o defectos. Sin información fidedigna, es imposible ni describir ni medir la variación en los procesos lo que hace imposible que la misma pueda ser reducida o eliminada.
Quizás el efecto más pernicioso de todos sea la destrucción del concepto de sistema, ya que dejamos de vernos como parte de un todo con una meta común y procesos para lograrla; para vernos más bien como una serie de partes independientes, con metas independientes, y motivaciones independientes, que "aparentemente" no tienen que interactuar. Como la interacción es un aspecto básico en los sistemas organizacionales, podemos imaginar el efecto que tratar de tapar el sol con un dedo puede tener sobre la vida.
Si no se tiene confianza en la calidad del proceso, la gente tiende a llevar múltiples controles paralelos que no agregan ningún valor al producto o servicio, y las cifras de distintas fuentes y características nunca son reales para tomar buenas decisiones, lo que nos lleva a sobre controlar el proceso y a recurrir a la inspección final para intentar tener un proceso de calidad. Como dijo Albert Einstein: "La mejor definición de locura que conozco es tratar de lograr resultados distintos,….haciendo lo mismo."
Para lograr controlar a los seres humanos se necesita del marketing del miedo

Para ser efectivo en la venta de algo, en el Marketing o venta de algún producto lo primero que se tiene que hacer es generar la atención de aquellos a los que se dirige (en este caso los posibles clientes), sin atención no tienes nada. Da igual que sea una maravilla lo que ofrezcas, si no te dedican un solo minuto para atenderte nunca vas a poder mostrar esa genialidad. De manera que la primera función del Marketing y la promoción debe ser llamar la atención y uno de los secretos más efectivos para hacerlo es el uso del miedo.

Hoy día con la expansión de los medios masivos de comunicación y la cultura de lo instantáneo en la que vivimos inmersos, el miedo es más poderoso que nunca. Si ya era algo que se expandía rápidamente por naturaleza, ahora lo es más, bastan cinco minutos de comunicación en una televisión para despertar esa sensación en las personas. Así que cuando en Marketing alguien precisa llamar la atención de otros y quiere garantizarse cierto éxito enseguida surge en su cabeza el posible uso del miedo. Es una herramienta tentadora... y efectiva.

Con el miedo se consigue atención, una de las mercancías más valiosas en la actualidad, donde apenas tenemos tiempo para hacer caso a nada.

Por esto en esta situación actual de nuestro país debemos y podemos nutrirnos de las pruebas y conjuntar toda la información que necesitaremos mas adelante para poder exhibir las ineficiencias y omisiones de algún gobierno o empresa.
Cuando algún individuo en un momento de peligro real o ficticio, pierde la capacidad de discernir y de exigir a las autoridades “las que sean” del partido que sea, que le otorga el solo hecho de existir, y el de ser ciudadano de algún país.

Entonces habrá hecho su labor el miedo creando espejismos de “esperanza”.
Y así cerrar las opiniones de los demás con respecto al mismo hecho y hasta podrán de calificarlo de crear división en las familias.

Ya que El sentido y la existencia de todo gobierno que es el representante del estado. Es precisamente el de llevar a cabo diferentes acciones.

En términos amplios, el gobierno es aquella estructura que ejerce las diversas actividades estatales, denominadas comúnmente poderes del Estado (funciones del Estado). El gobierno, en sentido propio, tiende a identificase con la actividad política.

La misión del gobierno es crear un sistema de protección social para y con las familias que viven en el Estado, asegurando al largo y corto plazo, los servicios de salud educación, trabajo etc. Y deberán ser de muy buena calidad y sin corrupción.


Me llama la atención mucho lo que el miedo en las personas puede crear, en algunos casos paraliza, en otros afecta como al avestruz escondiendo la cabeza y dejando el cuerpo al aire, y en otros la incapacidad de acción y de aceptación de cualquier “ realidad ” manejada o no, por los medios masivos de comunicación incluso por los mismos gobiernos.

El pensar que un grupo de personas actuara como “dioses”, resolviendo con eficacia todo hecho, Es para mi sinónimo de algún tipo de “ceguera”, y emprende a la negación personal y la creación de héroes ficticios “ídolos de barro”.

Cuando un hecho como el que esta aconteciendo en nuestro país, invita a ciertas personas a tratar de hacer un análisis equilibrado, donde por consecuencia se pueden notar las incapacidades y la falta de inversión en los sistemas de salud y de la inequidad del sistema de los gobiernos en materia social, educacional, de salud, económica etc. concibiéndolo como un todo y no llevándolo a la situación del individualismo.

Y en otras personas el enojo y hasta la preocupante irascibilidad hacia la persona que objetivamente cuestiona a cualquier gobierno o acción de gobierno, y produce esa ira hacia la persona que cuestiona llamándolo algunas veces un “peligro para la familia ya que divide”; me lleva a la conclusión de que sir Francis bacón tenia razón cuando escribió…


“Quien no quiere pensar es un fanático; Quien no puede pensar, es un idiota; Quien no osa pensar es un cobarde”‏.

Ya no sufras ohhh hermano* tu diriges tu sentir*
Goza la lucha temprano, como antes de dormir*
Cuando tu ya estés cansado de luchar y de seguir*
Piensa con todo mi hermano*
Ya no aflijas tu vivir *
El que siembra si cosecha, lo harás antes de partir*
Nuestras luchas son humanas no claudiques al vivir*
Al final todo esta dicho la victoria es nuestro fin.*


ANIMO!!!