martes, 5 de mayo de 2009

Una Disneylandia con teiboleras porcinas

Política cero
Jairo Calixto Albarrán

Por mucha dignidad que haya que tener en estos momentos en que tantos y tantos países hermanos nos tratan cual apestados en una maternidad (ayer escribí que en reciprocidad fraternal de nuestros camaradas bolivarianos, ya no íbamos a importar de esas naciones entre otras muchos oficiantes de cierto tipo de oficios dudosos, a teiboleras regularmente traídas de Cuba u Argentina, pero debido a la cantidad de lectores molestos ante tan draconiana medida, reculo), está mal que Jelipillo haya salido a decir que México no pide caridad, pero sí respeto. Yo creo que un poco de caridad no estaría nada mal, sobre todo después de crisis económicas, desempleo, matazones, descabezados, temblores e influenza, sí se requiere de algo más que un poco de respeto burocrático del que se envían en forma de boletines diplomáticos mientras cierran fronteras como nuestros amigos argentinos, franceses, chilenos, cubanos…
Leer Nota AQUI