La reacción de la vieja clase política no se hizo esperar. “Distrae de los principales temas de la agenda nacional”, dijo el senador del PAN Gustavo Madero, como si plantear una transición pacífica a través de la contienda presidencial de 2012 no fuera tema fundamental de esa agenda.
“Estamos frente a un evento prematuro”, señaló el senador Beltrones, al igual que su correligionario el gobernador y candidato de las televisoras Enrique Peña Nieto, quien en un derroche autocrítico señaló: “son actuaciones anticipadas, a dos años de la elección me parece que los ánimos de algunos se están desbordando”. “Viola la ley electoral al adelantarse y presentar su aspiración presidencial y su plataforma política rumbo a 2012”, secundó Murillo Karam, secretario del PRI, amagando con acudir al Trife, como buen catequista de la legalidad.