domingo, 4 de abril de 2010

Lo que callamos los narcos

Proceso en la guarida de "El Mayo" Zambada.

Julio Scherer García

Edición 1744, 2010-04-04

MÉXICO, D.F., 3 de abril (Proceso).- Una expresión de Julio Scherer García ha quedado grabada con hierro candente, entre muchas otras, en quienes colaboramos con él. “Si el Diablo me ofrece una entrevista, voy a los infiernos…”. En el mayor de los sigilos, bajo la exigencia de reserva absoluta que él respetó y respeta, el fundador de Proceso fue convocado a encontrarse con Ismael El Mayo Zambada. “Tenía interés en conocerlo”, le dijo el capo del cártel de Sinaloa, colega y compadre del Chapo Guzmán. En el encuentro, que terminó en puntos suspensivos, El Mayo Zambada dejó un reto: “Me pueden agarrar en cualquier momento… o nunca”.
Un día de febrero recibí en Proceso un mensaje que ofrecía datos claros acerca de su veracidad. Anunciaba que Ismael Zambada deseaba conversar conmigo.

La nota daba cuenta del sitio, la hora y el día en que una persona me conduciría al refugio del capo. No agregaba una palabra.

A partir de ese día ya no me soltó el desasosiego. Sin embargo, en momento alguno pensé en un atentado contra mi persona. Me sé vulnerable y así he vivido. No tengo chofer, rechazo la protección y generalmente viajo solo, la suerte siempre de mi lado.

La persistente inquietud tenía que ver con el trabajo periodístico. Inevitablemente debería contar las circunstancias y pormenores del viaje, pero no podría dejar indicios que llevaran a los persecutores del capo hasta su guarida. Recrearía tanto como me fuera posible la atmósfera del suceso y su verdad esencial, pero evitaría los datos que pudieran convertirme en un delator.

Me hizo bien recordar a Octavio Paz, a quien alguna vez le oí decir, enfático como era:

“Hasta el último latido del corazón, una vida puede rodar para siempre”.

* * *

Una mañana de sol absoluto, mi acompañante y yo abordamos un taxi del que no tuve ni la menor idea del sitio al que nos conduciría. Tras un recorrido breve, subimos a un segundo automóvil, luego a un tercero y finalmente a un cuarto. Caminamos en seguida un rato largo hasta detenernos ante una fachada color claro. Una señora nos abrió la puerta y no tuve manera de mirarla. Tan pronto corrió el cerrojo, desapareció.

La casa era de dos pisos, sólida. Por ahí había cinco cuadros, pájaros deformes en un cielo azuloso. En contraste, las paredes de las tres recámaras mostraban un frío abandono. En la sala habían sido acomodados sillones y sofás para unas diez personas y la mesa del comedor preveía seis comensales.

Me asomé a la cocina y abrí el refrigerador, refulgente y vacío. La curiosidad me llevó a buscar algún teléfono y sólo advertí aparatos fijos para la comunicación interna. La recámara que me fue asignada tenía al centro una cama estrecha y un buró de tres cajones polvosos. El colchón, sin sábana que lo cubriera, exhibía la pobreza de un cobertor viejo. Probé el agua de la regadera, fría y en el lavamanos vi cuatro botellas de Bonafont y un jabón usado.

Hambrientos, el mensajero y yo salimos a la calle para comer, beber lo que fuera y estirar las piernas. Caminamos sin rumbo hasta una fonda grata, la música a un razonable volumen. Hablamos sin conversar, las frases cortadas sin alusión alguna a Zambada, al narco, la inseguridad, el ejército que patrullaba las zonas periféricas de la ciudad.

Volvimos a la casa desolada ya noche. Nos levantaríamos a las siete de la mañana. A las ocho del día siguiente desayunamos en un restaurante como hay muchos. Yo evitaba cualquier expresión que pudiera interpretarse como un signo de impaciencia o inquietud, incluso la mirada insistente a los ojos, una forma de la interrogación profunda. El tiempo se estiraba, indolente y comíamos con lentitud.

Las horas siguientes transcurrieron entre las cuatro paredes ya conocidas. Yo llevaba conmigo un libro y me sumergí en la lectura, a medias. Mi acompañante parecía haber nacido para el aislamiento. Como si nada existiera a su alrededor, llegué a pensar que él mismo pudiera haber desaparecido sin darse cuenta, sin advertirlo. Me duele escribir que no tenía más vida que la servidumbre, la existencia sin otro horizonte que el minuto que viene.

“Ya nos avisarán –me dijo sorpresivamente–. La llamada vendrá por el celular”.

Pasó un tiempo informe, sin manecillas. ‘Paciencia’, me decía.

Salimos al fin a la oscuridad de la noche. En unas horas se cruzarían el ocaso y el amanecer sin luz ni sombra, quieto el mundo.

Extracto de la narración de Scherer García que se publica en la edición 1744 de la revista Proceso, ya en circulación.



Tomado de Revista Proceso
Domingo 4 de abril 2010

En la guarida del Mayo Zambada
Crónica de un encuentro insólito
Julio Scherer García

Un día de febrero recibí en Proceso un mensaje que ofrecía datos claros acerca de su veracidad. Anunciaba que Ismael Zambada deseaba conversar conmigo. La nota daba cuenta del sitio, la hora y el día en que una persona me conduciría al refugio
del capo. No agregaba una palabra.

A partir de ese día ya no me soltó el desasosiego. Sin embargo, en momento alguno pensé en un atentado contra mi persona. Me sé vulnerable y así he vivido. No tengo chofer, rechazo la protección y generalmente viajo solo, la suerte siempre de mi lado.

La persistente inquietud tenía que ver con el trabajo periodístico. Inevitablemente debería contar las circunstancias y pormenores del viaje, pero no podría dejar indicios que llevaran a los persecutores del capo hasta su guarida. Recrearía tanto como me fuera posible la atmósfera del suceso y su verdad esencial, pero evitaría los datos que pudieran convertirme en un delator.
Me hizo bien recordar a Octavio Paz, a quien alguna vez le oí decir, enfático como era: “Hasta el último latido del corazón, una vida puede rodar para siempre.”

Una mañana de sol absoluto, mi acompañante y yo abordamos un taxi del que no tuve ni la menor idea del sitio al que nos conduciría. Tras un recorrido breve, subimos a un segundo automóvil, luego a un tercero y fi nalmente a un cuarto. Caminamos en seguida un rato largo hasta detenernos ante una fachada color claro. Una señora nos abrió la puerta y no tuve manera de mirarla. Tan pronto corrió el cerrojo, desapareció.
La casa era de dos pisos, sólida. Por ahí había cinco cuadros, pájaros deformes en un cielo azuloso. En contraste, las paredes de las tres recámaras mostraban un frío abandono. En la sala habían sido acomodados sillones y sofás para unas diez personas
y la mesa del comedor preveía seis comensales.
Me asomé a la cocina y abrí el refrigerador, refulgente y vacío.
La curiosidad me llevó a buscar algún teléfono y sólo advertí aparatos fijos para la comunicación interna. La recámara que me fue asignada tenía al centro una cama estrecha y un buró de tres cajones polvosos. El colchón, sin sábana que lo cubriera,
exhibía la pobreza de un cobertor viejo. Probé el agua de la regadera, fría, y en el lavamanos vi cuatro botellas de Bonafont y un jabón usado.
Hambrientos, el mensajero y yo salimos a la calle para comer, beber lo que fuera y estirar las piernas. Caminamos sin rumbo hasta una fonda grata, la música a un razonable volumen.
Hablamos sin conversar, las frases cortadas sin alusión alguna a Zambada, al narco, la inseguridad, el ejército que patrullaba las zonas periféricas de la ciudad.
Volvimos a la casa desolada ya noche. Nos levantaríamos a las siete de la mañana. A las ocho del día siguiente desayunamos en un restaurante como hay muchos. Yo evitaba cualquier expresión que pudiera interpretarse como un signo de impaciencia o
inquietud, incluso la mirada insistente a los ojos, una forma de la interrogación profunda. El tiempo se estiraba, indolente, y comíamos con lentitud.
Las horas siguientes transcurrieron entre las cuatro paredes ya conocidas. Yo llevaba conmigo un libro y me sumergí en la lectura, a medias. Mi acompañante parecía haber nacido para el aislamiento. Como si nada existiera a su alrededor, llegué a pensar que él mismo pudiera haber desaparecido sin darse cuenta, sin advertirlo. Me duele escribir que no tenía más vida que la servidumbre, la existencia sin otro horizonte que el minuto que viene.
“Ya nos avisarán –me dijo sorpresivamente–. La llamada vendrá por el celular.”
Pasó un tiempo informe, sin manecillas. ‘Paciencia’, me decía.
Salimos al fin a la oscuridad de la noche. En unas horas se cruzarían el ocaso y el amanecer sin luz ni sombra, quieto el mundo.

Viajamos en una camioneta, seguidos de otra. La segunda desapareció de pronto y ocupó su lugar una tercera. Nos seguía, constante, a cien metros de distancia. Yo sentía la soledad y el silencio en un paisaje de planicies y montañas.
Por veredas y caminos sinuosos ascendimos una cuesta y de un instante a otro el universo entero dio un vuelco. Sobre una superficie de tierra apisonada y bajo un techo de troncos y bejucos, habíamos llegado al refugio del capo, cotizada su cabeza
en millones de dólares, famoso como el Chapo y poderoso como el colombiano Escobar, en sus días de auge, zar de la droga.

Ismael Zambada me recibió con la mano dispuesta al saludo y unas palabras de bienvenida:

–Tenía mucho interés en conocerlo.
–Muchas gracias –respondí con naturalidad.

Me encontraba en una construcción rústica de dos recámaras y dos baños, según pude comprobar en los minutos que me pude apartar del capo para lavarme. Al exterior había una mesa de madera tosca para seis comensales, y bajo un árbol que parecía
un bosque, tres sillas mecedoras con una pequeña mesa al centro. Me quedó claro que el cobertizo había sido levantado con el propósito de que el capo y su gente pudieran abandonarlo al primer signo de alarma. Percibí un pequeño grupo de
hombres juramentados.
A corta distancia del narco, los guardaespaldas iban y venían, a veces los ojos en el jefe y a ratos en el panorama inmenso que se extendía a su alrededor. Todos cargaban su pistola y algunos, además, armas largas. Dueño de mí mismo, pero nervioso, vi en el suelo un arma negra que brillaba intensamente bajo un sol vertical. Me dije, deliberadamente forzada la imagen: podría tratarse de un animal sanguinario que dormita.

–Lo esperaba para que almorzáramos juntos–, me dijo Zambada y señaló la silla que ocuparía, ambos de frente.

Observé de reojo a su emisario, las mandíbulas apretadas.

Me pedía que no fuera a decir que ya habíamos desayunado.

Al instante fuimos servidos con vasos de jugo de naranja y vasos de leche, carne, frijoles, tostadas, quesos que se desmoronaban entre los dedos o derretían en el paladar, café azucarado.

–Traigo conmigo una grabadora electrónica con juego para
muchas horas–, aventuré con el propósito de ir creando un ambiente
para la entrevista.

–Platiquemos primero.

Le pregunté al capo por Vicente, Vicentillo.
–Es mi primogénito, el primero de cinco. Le digo “Mijo”. También es mi compadre.
Zambada siguió en la reseña personal:
–Tengo a mi esposa, cinco mujeres, quince nietos y un bisnieto.
Ellas, las seis, están aquí, en los ranchos, hijas del monte, como yo. El monte es mi casa, mi familia, mi protección, mi tierra, el agua que bebo. La tierra siempre es buena, el cielo no.

–No le entiendo.

–A veces el cielo niega la lluvia.

Hubo un silencio que aproveché de la única manera que me fue posible:

–¿Y Vicente?
–Por ahora no quiero hablar de él. No sé si está en Chicago o Nueva York. Sé que estuvo en Matamoros.

–He de preguntarle, soy lo que soy. A propósito de su hijo, ¿vive usted su extradición con remordimientos que lo destrocen en su amor de padre?

–Hoy no voy a hablar de “Mijo”. Lo lloro.

–¿Grabamos?

Silencio.

–Tengo muchas preguntas–, insistí ya debilitado.

–Otro día. Tiene mi palabra.

Lo observaba. Sobrepasa el 1.80 de estatura y posee un cuerpo como una fortaleza, más allá de una barriga apenas pronunciada.

Viste una playera y sus pantalones de mezclilla azul mantienen la línea recta de la ropa bien planchada. Se cubre con una gorra y el bigote recortado es de los que sugieren una sutil y permanente ironía.

–He leído sus libros y usted no miente–, me dice.

Detengo la mirada en el capo, los labios cerrados.

–Todos mienten, hasta Proceso. Su revista es la primera, informa más que todos, pero también miente.

–Señáleme un caso.

–Reseñó un matrimonio que no existió.

–¿El del Chapo Guzmán?

–Dio hasta pormenores de la boda.

–Sandra Ávila cuenta de una fiesta a la que ella concurrió y en la que estuvo presente el Chapo.

–Supe de la fiesta, pero fue una excepción en la vida del Chapo. Si él se exhibiera o yo lo hiciera, ya nos habrían agarrado.

–¿Algunas veces ha sentido cerca al ejército?

–Cuatro veces. El Chapo más.

–¿Qué tan cerca?

–Arriba, sobre mi cabeza. Huí por el monte, del que conozco los ramajes, los arroyos, las piedras, todo. A mí me agarran si me estoy quieto o me descuido, como al Chapo. Para que hoy pudiéramos reunirnos, vine de lejos. Y en cuanto terminemos,
me voy.

–¿Teme que lo agarren?

–Tengo pánico de que me encierren.

–Si lo agarraran, ¿terminaría con su vida?

–No sé si tuviera los arrestos para matarme. Quiero pensar que sí, que me mataría.
Advierto que el capo cuida las palabras. Empleó el término arrestos, no el vocablo clásico que naturalmente habría esperado.

Zambada lleva el monte en el cuerpo, pero posee su propio encierro. Sus hijos, sus familias, sus nietos, los amigos de los hijos y los nietos, a todos les gustan las fiestas. Se reúnen con frecuencia en discos, en lugares públicos y el capo no puede
acompañarlos. Me dice que para él no son los cumpleaños, las celebraciones en los santos, pasteles para los niños, la alegría de los quince años, la música, el baile.

–¿Hay en usted espacio para la tranquilidad?

–Cargo miedo.

–¿Todo el tiempo?

–Todo.

–¿Lo atraparán, finalmente?

–En cualquier momento o nunca.

Zambada tiene sesenta años y se inició en el narco a los dieciséis. Han transcurrido cuarenta y cuatro años que le dan una gran ventaja sobre sus persecutores de hoy. Sabe esconderse, sabe huir y se tiene por muy querido entre los hombres y las mujeres donde medio vive y medio muere a salto de mata.

–Hasta hoy no ha aparecido por ahí un traidor–, expresa de pronto para sí. Lo imagino insondable.

–¿Cómo se inició en el narco?

Su respuesta me hace sonreír.

–Nomás.

–¿Nomás?

Vuelvo a preguntar:

–¿Nomás?

Vuelve a responder:

–Nomás.

Por ahí no sigue el diálogo y me atengo a mis propias ideas: el narcotráfico como un imán irresistible y despiadado que persigue el dinero, el poder, los yates, los aviones, las mujeres propias y ajenas con las residencias y los edificios, las joyas como cuentas de colores para jugar, el impulso brutal que lleve a la cúspide. En la capacidad del narcotráfico existe, ya sin horizonte y aterradora, la capacidad para triturar.

Zambada no objeta la persecución que el gobierno emprende para capturarlo. Está en su derecho y es su deber. Sin embargo, rechaza las acciones bárbaras del Ejército.
Los soldados, dice, rompen puertas y ventanas, penetran en la intimidad de las casas, siembran y esparcen el terror. En la guerra desatada encuentran inmediata respuesta a sus acometidas.

El resultado es el número de víctimas que crece incesante.

Los capos están en la mira, aunque ya no son las figuras únicas de otros tiempos.

–¿Qué son entonces? –pregunto.

Responde Zambada con un ejemplo fantasioso:

–Un día decido entregarme al gobierno para que me fusile.

Mi caso debe ser ejemplar, un escarmiento para todos. Me fusilan y estalla la euforia. Pero al cabo de los días vamos sabiendo que nada cambió.

–¿Nada, caído el capo?

–El problema del narco envuelve a millones. ¿Cómo dominarlos?

En cuanto a los capos, encerrados, muertos o extraditados, sus reemplazos ya andan por ahí.

A juicio de Zambada, el gobierno llegó tarde a esta lucha y no hay quien pueda resolver en días problemas generados por años. Infiltrado el gobierno desde abajo, el tiempo hizo su “trabajo” en el corazón del sistema y la corrupción se arraigó
en el país. Al presidente, además, lo engañan sus colaboradores.
Son embusteros y le informan de avances, que no se dan, en esta guerra perdida.

–¿Por qué perdida?

–El narco está en la sociedad, arraigado como la corrupción.

–Y usted, ¿qué hace ahora?

–Yo me dedico a la agricultura y a la ganadería, pero si puedo hacer un negocio en los Estados Unidos, lo hago.

Yo pretendía indagar acerca de la fortuna del capo y opté por valerme de la revista Forbes para introducir el tema en la conversación.
Lo vi a los ojos, disimulado un ánimo ansioso:

–¿Sabía usted que Forbes incluye al Chapo entre los grandes millonarios del mundo?

–Son tonterías.

Tenía en los labios la pregunta que seguiría, ahora superflua, pero ya no pude contenerla.

–¿Podría usted figurar en la lista de la revista?

–Ya le dije. Son tonterías.

–Es conocida su amistad con el Chapo Guzmán y no podría llamar la atención que usted lo esperara fuera de la cárcel de Puente Grande el día de la evasión. ¿Podría contarme de qué manera vivió esa historia?

–El Chapo Guzmán y yo somos amigos, compadres y nos hablamos por teléfono con frecuencia. Pero esa historia no existió. Es una mentira más que me cuelgan. Como la invención de que yo planeaba un atentado contra el presidente de la República. No se me ocurriría.

–Zulema Hernández, mujer del Chapo, me habló de la corrupción que imperaba en Puente Grande y de qué manera esa corrupción facilitó la fuga de su amante. ¿Tiene usted noticia acerca de los acontecimientos de ese día y cómo se fueron desarrollando?

–Yo sé que no hubo sangre, un solo muerto. Lo demás, lo desconozco.

Inesperada su pregunta, Zambada me sorprende:

–¿Usted se interesa por el Chapo?

–Sí, claro.

–¿Querría verlo?

–Yo lo vine a ver a usted.

–¿Le gustaría…?

–Por supuesto.

–Voy a llamarlo y a lo mejor lo ve.

La conversación llega a su fin. Zambada, de pie, camina bajo la plenitud del sol y nuevamente me sorprende:

–¿Nos tomamos una foto?

Sentí un calor interno, absolutamente explicable. La foto probaba la veracidad del encuentro con el capo.

Zambada llamó a uno de sus guardaespaldas y le pidió un sombrero. Se lo puso, blanco, finísimo.

–¿Cómo ve?

–El sombrero es tan llamativo que le resta personalidad.

–¿Entonces con la gorra?

–Me parece.

El guardaespaldas apuntó con la cámara y disparó. ●

Asamblea dominical de Floy y Canto






En la asamblea dominical de Flor y Canto estuvo hoy José Alfonso Suárez del Real, quien renunció al PRD después de 15 años de militancia, por su inconformidad con las alianzas con el PAN.

Suárez del Real comentó la grave situación que atravesamos los mexicanos en estos momentos y la necesidad de que para revertir esta situación, nos organicemos.

Solo con la resistencia y con la organización podremos rescatar a México del constante deterioro que se presenta en todos los aspectos de su vida política y social.
También estuvieron presentes miembros de la Alianza de Barrios, quienes comentaron la importancia de defender nuestros valores culturales y una forma de vida digna. Contrario al pensamiento neoliberal, que resalta los valores extranjeros y privatizadores, los mexicanos debemos promover un tipo de pensamiento nacional, donde se respete a los viejos, como a los jóvenes, a las mujeres y a todos los miembros de la sociedad.
Asimismo en la asamblea que coordina Froylán Yescas se invitó a participar en la marcha del día 1º de mayo, para exigir la restauración de los derechos laborales perdidos y para protestar por la falta de empleo.

Froylán también hizo la invitación para que el próximo jueves acudamos a la sede de la Representación de la Casa Puebla en el D.F., en Av. Chapultepec 494, col. Roma, a las 10.30 de la mañana, para pedir la libertad de las 30 mujeres que están encarceladas por haber abortado, aunque haya sido un aborto espontáneo. Luchemos por el derecho de la mujer a decidir y contra la política retrógrada de estados como Puebla.

Y mañana lunes, en el Centro de Coyoacán, en el Jardín Hidalgo, se conmemorará el XIII Aniversario Luctuoso del Ing. Heberto Castillo Martínez, donde estarán presentes la profesora María Teresa Juárez de Castillo y la Dip. Laura Itzel Castillo, a las 10.30 de la mañana.
Visita www.florycanto.org.mx
¡Es un honor luchar con Obrador!


Plan 2030: ocupación integral de México

Nancy Flores

El proyecto transexenal calderonista México 2030 garantiza “la ocupación integral del país”: rompe las voluntades sociales y los marcos jurídicos, reprime y coopta. Inspirado en el imperialismo que encabeza Estados Unidos, su fin es acabar con el Estado nación mexicano, señala Gilberto López y Rivas; por ello, dice, los mexicanos enfrentan una “guerra social” disfrazada de combate al narcotráfico. En el mapa anexo a esta edición, Contralínea reconstruye gráficamente los principales objetivos de la ocupación

Otros textos de la serie:

1. Proyecto México 2030: la venta de un país
2. Plan México 2030: “acotar” crimen organizado, no exterminarlo
3. Entrega Calderón áreas estratégicas a trasnacionales
4. Plan México 2030: desmantelar la seguridad social
5. Proyecto 2030: venta total de las reservas de la biósfera
6. Plan 2030: “mexicoamericanos” gobernarán la nación
7. Plan 2030: ocupación integral de México

/ Séptima y última parte

El plan transexenal calderonista México 2030, Proyecto de Gran Visión, urde la ocupación integral del país, señala Gilberto López y Rivas. Con éste, la “clase dominante” pretende desmantelar el Estado-nación mexicano, explica el integrante del grupo Paz con Democracia e investigador del Instituto Nacional de Antropología e Historia.

Los 14 documentos que integran el plan detallan que uno de sus principales objetivos es la creación de una nueva constitución política. Los archivos –desclasificados por la Presidencia de la República y consultados por Contralínea– revelan que esa carta magna abolirá la propiedad pública, desconocerá los derechos colectivos, el patrimonio y los bienes nacionales, y abandonará el concepto de soberanía nacional.

Con ese nuevo marco jurídico se materializarán los propósitos del Proyecto de Gran Visión, entre los que destacan: ceder el control gubernamental del país a “mexicoamericanos”; privatizar la salud, la educación, el agua, la energía, los minerales, las reservas de la biósfera, el patrimonio cultural, las carreteras, las telecomunicaciones; extinguir la propiedad ejidal y comunal; abolir los derechos a la sindicalización y a la protesta social en caso de expropiaciones.

En dos décadas, México será “un país con una nueva constitución y armonía entre la legislación interna y externa”, indica el apartado dedicado a la política exterior. El investigador Pablo Moctezuma Barragán observa que a los autores del plan “les estorba” la actual Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Leer mas...AQUI

La militarización del TLCAN

Una oligarquía neoliberal internacional opera conjuntamente bajo las órdenes de Washington. Su intención es crear una gran zona comercial donde las empresas dirigidas por los grandes patrones no sólo dispongan del poder económico, sino también político, afines igualmente a los intereses de Estados Unidos. Por ello, el Pentágono ha planeado invadir a los países miembros que enfrenten un “caos económico”. Para ello, se vale no sólo del poder económico, sino también militar. Se trata de una de las investigaciones que durante 2009 fueron censuradas en los grandes medios de comunicación

Laura Carlsen / Stephen Lendman / Constance Fogal / Red Voltaire

Líderes de Canadá, Estados Unidos y México han estado reuniéndose secretamente para ampliar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte. Se trata del bloque comercial formado por los países antes mencionados, que establece una zona de libre comercio. Entró en vigor en enero de 1994. Pero ahora se avanza en la “integración profunda” de una fuerza trinacional más militarizada bajo el concepto estadunidense de “seguridad de la patria”.

La llamada Alianza para la Prosperidad y Seguridad de América del Norte (ASPAN), impulsada hacia el interior de los países por los respectivos gobiernos y sin conocimiento ni mucho menos el consentimiento público –con su oficina central en Washington–, se propone integrar a las tres naciones en un sólo bloque político, económico y de seguridad.
Leer mas...AQUI

La guardería y el enésimo caso de impunidad

Álvaro Cepeda Neri

Las averiguaciones de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y sus informes, sobre violaciones a los derechos humanos, son como los llamados a misa de la iglesia con sus ministros pederastas. No tienen ninguna finalidad, en la medida que no son consignados los presuntos responsables. Y menos dan lugar a un proceso para un deslinde de responsabilidades penales y civiles. Se trata de darle “atole con el dedo” a los quejosos, terceros perjudicados y a las víctimas.

Los últimos informes sobre abuso del poder y violación a los derechos humanos, que van desde agresiones, torturas y cancelación de la libertad, hasta homicidios, en los estados de Puebla, Oaxaca y Sonora, son un pitorreo del pleno de esa Corte (que bien pudiera haber consignado esos expedientes como denuncias ante la Procuraduría General de la República, PGR). La propaganda del Poder Judicial de la Federación, por radio, televisión y prensa escrita, dizque informando sobre sus actividades, es para hacernos creer que imparte justicia, pero es la complicidad de la elite gobernante, para darse impunidad. Son los ministros, funcionarios encubridores, corruptos y tan perversos como los pintó Orozco, en un mural del edificio de la Suprema Corte, como un antro, una cueva de ladrones prostituyendo a la Justicia: una diosa en manos de jueces prevaricadores y en juerga de libertinos.

En Sonora, no obstante el infanticidio de 49 niños, muertos por homicidios con todas las agravantes, y 75 niños más, marcados de por vida por las lesiones sufridas, en aquel incendio del 5 de junio de 2009, en la Guardería ABC, domiciliada en la capital de Sonora, no hay nada tras la averiguación de la presunta responsabilidad administrativa, penal y civil del entonces desgobernador Robinson-Bours; el también entonces director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Molinar Horcasitas; el que fuera presidente municipal de Hermosillo, Ernesto Gándara; los beneficiarios directos de la ilegal subrogación y una lista de funcionarios, por negligencia, omisiones y hasta complicidades.
Leer mas...AQUI

Los billonarios de Forbes

Guillermo Garduño Valero

Detrás de cada gran fortuna hay un gran crimen

Honorato de Balzac

De todos es conocido que en marzo el número especial de la revista Forbes reporta a los hombres más ricos del mundo. Pertenecer a esta selección representa poseer un mínimo de 1 mil millones de dólares; la metodología con la cual la lista es elaborada está en función de sus activos públicos y de su participación en actividades bursátiles e ingenierías financieras, además de la importancia estratégica de los sectores que dominan. Estos últimos criterios se han ido perfeccionado, lo cual representa que si antes eran incluidos elementos de la llamada nobleza como el Sultán de Brunei, hoy la globalidad obliga a echar a un lado la tradición y emprenderla con los sujetos globales.
En este sentido, cabría preguntarse por qué una cienmillonésima parte de los mexicanos aparecen en esta lista que encabeza Carlos Slim. La respuesta inmediata por parte de una publicación inglesa es que se trata de hombres de negocios ubicados en economías emergentes; respuesta que no deja nada en claro si no se reconstruye el marco de las condiciones y contexto que propiciaron su enriquecimiento ilimitado.

Llama poderosamente la atención ciertas coincidencias que concurren y coinciden en la formación de esta elite. La primera es que su emergencia está marcada en un periodo donde la figura presidencial es Carlos Salinas de Gortari, el último emisario del presidencialismo autoritario mexicano, pues después de él no es que sus sucesores no hayan pretendido serlo, sino que les ha sido imposible reconstruir el viejo modelo por la existencia de nuevas fuerzas al interior del Estado que ya no permiten la reconstrucción del antiguo régimen, aunque sí la continuidad de esta elite, donde muchos de los nombrados no eran aún considerados como parte de este grupo de dinero, poder, privilegio e impunidad.

Una segunda situación es que resultan ser los beneficiarios de las empresas que el Estado desincorporó del patrimonio nacional, a las cuales se les tildó de ineficientes, ineficaces, en números rojos e insustentables, por lo que fueron rematadas en operaciones que nunca tuvieron una licitación pública, abierta ni transparente. Además de ser entregadas como Telmex en monopolio de la actividad y en oligopolio para el caso de las frecuencias televisivas o de las concesiones mineras. Así que hay que explicarse el milagro de la beatitud de los empresarios que transforman empresas públicas en fuentes de beneficio privado.

Leer mas...AQUI
Gaceta proletaria.
Gabriel Pantoja Cárdenas
Proyecto entreguista de la derecha la venta de un país
Estimados compañeros, amigos y lectores de este espacio, en esta ocasión me sirvo presentar a ustedes, para su debido conocimiento, un excelente artículo de la autora Nancy Flores, y publicado por Contralínea número 170, del 21 de febrero de 2010. La prestigiada autora nos muestra en este trabajo de investigación la ruta que sigue nuestro país bajo la conducción de la derecha; una vez conocido el contenido dependerá de cada patriota si se permite o no su concreción, por lo pronto, dispóngase a tomar nota de los peligros que afronta nuestra patria, justamente a 200 años de haberse iniciado la lucha por la independencia del país.
Catorce documentos –que forman parte del expediente México 2030, Proyecto de Gran Visión– revelan los planes del gobierno federal para privatizar los sectores estratégicos y los bienes de la nación. Energía, agua, zonas de reserva de la biósfera, salud, ciencia y tecnología quedarán en manos de la iniciativa privada; además, se legalizará el lobbyng para que las empresas nacionales y extranjeras hagan prevalecer sus intereses en el Congreso de la Unión. El proyecto de nación de Calderón Hinojosa (en el que destacan la extinción de Luz y Fuerza del Centro, la desaparición de la Secretaría de Energía y la creación de una secretaría o instituto de infraestructura) fue ideado antes del 1 de diciembre de 2006 por altos ejecutivos de trasnacionales, empresarios, políticos del PRI y del PAN y académicos afines. Con este trabajo, Contralínea inicia la publicación de una serie de reportajes que abordan de manera detallada los principales objetivos del plan transexenal: abolir la propiedad pública y legalizar el despojo
Leer mas...AQUI
Acuerdos
Pedro Echeverría V.
Rusia, Venezuela y Bolivia acuerdan intercambios con el temor, disfrazado de burla, del gobierno yanqui.
1. Vladimir Putin, el premier ruso, visitó antier Venezuela. Hugo Chávez, en su discurso como gobierno anfitrión, resaltó la “cooperación estratégica” del Kremlin con el Palacio de Miraflores y anunció que el apoyo de Moscú es para que Venezuela tenga su propia industria para el uso de su espacio ultraterrestre. El primero en sobresaltar con disgusto fue el gobierno yanqui porque ve en la estrategia chavista un estrechamiento importante en las relaciones entre ambos países y la región; sobre todo porque Evo Morales, el presidente boliviano, también aprovechó la visita de Putin a Venezuela para realizar algunos acuerdos de apoyo. Por eso el pronunciamiento de ayer del Departamento de Estado de EEUU, al mofarse de los planes del presidente venezolano de llevar a cabo un programa espacial, resulta ridículo. Dijo –sangrando su lengua- que los objetivos de Caracas “deberían ser más terrestres que extraterrestres”.
Leer mas...AQUI
Amenazas a la soberanía energética

Pemex, en riesgo ante parcialidad de tribunales

Tras signar tratados, la paraestatal es vulnerable a disputas que promuevan trasnacionales: expertos

Cortes de arbitraje internacionales tienden a favorecer a firmas privadas

Periódico La Jornada
Domingo 4 de abril de 2010, p. 2

El Comité Nacional de Estudios de la Energía (CNEE), que aglutina a especialistas en la materia y académicos, alertó a México sobre el peligro latente en que se encuentra la industria petrolera del país al firmar tratados internacionales y ante resoluciones arbitrales en disputas con empresas trasnacionales porque usualmente los estados productores pierden este tipo de querellas.

Integrantes del CNEE hicieron la advertencia después de que el martes pasado un tribunal arbitral internacional condenó a Ecuador a pagar 700 millones de dólares a la petrolera Chevron- Texaco debido a que las cortes ecuatorianas presuntamente violaron leyes internacionales al demorar sus fallos en disputas comerciales entre la petrolera y el país sudamericano.
Leer mas...AQUI

Retrógrada, la reforma laboral panista, sostiene académica

Desconocen las experiencias de 20 años en AL; sólo llevaron a la precariedad

Periódico La Jornada
Domingo 4 de abril de 2010, p. 8

La iniciativa de reforma laboral del PAN se sustenta en una visión empresarial, "retrógrada en términos ideológicos", porque plantea –sin sustento alguno, como ocurrió en los años 80– que flexibilizar el mercado de trabajo es la vía para generar empleos.

Graciela Bensusán, abogada y académica especialista en la Ley Federal del Trabajo (LFT), sostuvo en entrevista que ninguno de los proyectos del PAN (en el sexenio pasado la llamada Ley Abascal y ahora la delineada por el secretario Javier Lozano) va al fondo para atender los rezagos estructurales derivados de la inmovilidad del artículo 123 constitucional, que debe cambiarse para, por ejemplo, eliminar las juntas de conciliación y crear tribunales autónomos, base para construir un verdadero sistema de justicia laboral.
Leer mas...AQUI

Propone PRD audiencias públicas


Periódico La Jornada
Domingo 4 de abril de 2010, p. 8

El PRD en el Senado propuso a la colegisladora realizar audiencias públicas sobre la iniciativa de reforma laboral que presentó el Ejecutivo, para escuchar a los actores involucrados en el tema y lograr una legislación más justa para la ciudadanía.

El senador por Chiapas Rubén Velázquez López recordó que la propuesta calderonista fue presentada ante la Cámara de Diputados el pasado 18 de marzo y actualmente se encuentra en comisiones.
Leer mas...AQUI

Elton John triunfó en Chichén Itzá


Periódico La Jornada
Domingo 4 de abril de 2010, p. 12

Chichén Itzá, Yuc., 3 de abril. A pesar de que –de acuerdo con un funcionario estatal de Yucatán– los aluxes (duendes) "tiraron" parte del escenario del concierto La noche del Sol, lo que ocasionó heridas a tres trabajadores; de que sacerdotes mayas de la comunidad de Pisté realizaron una "ceremonia de desagravio" cerca de la zona, y de la protesta de artesanos "segregados" del proyecto turístico de la entidad, esta noche el cantautor pop inglés Elton John se presentó en la zona arqueológica de Chichén Itzá, patrimonio de la humanidad, de acuerdo con la UNESCO.
Leer mas...AQUI

El Despertar


Pascua

José Agustín Ortiz Pinchetti

Soy liberal y hasta un poco jacobino, pero esto de la Pascua me inspira (no así el tenebrista Viernes Santo). Y me gusta porque la conmemoración de la resurrección tiene un correlato poético con el resurgimiento de la vida en el inicio del estiaje en que todo reflorece y verdea. Además, su origen: el pesah judío, la celebración de la ruptura del cautiverio en Egipto, un acto político, una huelga nacional, una hazaña de resistencia civil activa.

La Pascua nos enfrenta al cristianismo. Soy cristiano herético, pero no puedo negar que esta doctrina es formidable: única utopía vigente. Hablar del cristianismo es difícil este año, por la denuncia de miles de abusos de sacerdotes católicos que han quedado impunes y porque cada semana aparece otro alegato inteligente en favor del ateísmo. Debemos ir a contracorriente.
Leer mas...AQUI

Ecuador: defensa soberana y contrastes preocupantes


El presidente de Ecuador, Rafael Correa, anunció ayer que propondrá a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) –de la que el propio mandatario ejerce la presidencia pro tempore– la creación de un frente común para paliar el creciente poder de las trasnacionales, "que nos creen todavía su patio trasero, (su) colonia; que creen que pueden pisotear nuestra dignidad y soberanía". El correlato de tales señalamientos es un fallo emitido por la Corte Penal de Arbitraje de la Haya, en Holanda, que obliga al gobierno de Quito a pagar 700 millones de dólares a la petrolera estadunidense Chevron –la cual enfrenta una demanda millonaria por daños ambientales en territorio ecuatoriano– luego de determinar supuestas violaciones al tratado bilateral de inversiones entre Estados Unidos y Ecuador.
Leer mas...AQUI

De qué reformas se habla

Arnaldo Córdiva

Las instituciones son condensados de relaciones sociales que tienden a permanecer en el tiempo, vale decir, a ser duraderas y sólidas. Hay muchas clases de instituciones. Unas de ellas son, por ejemplo, las leyes, en las que se expresan esas relaciones; otras son las organizaciones estatales, internas e internacionales; otras son las comunidades de seres humanos y, así por el estilo, todo aquello que se da como una asociación de individuos u organizaciones convenidas por los humanos. En todo caso el sentido esencial de la institucionalidad es la permanencia de esos condensados de relaciones sociales.
Leer mas...AQUI

Cuba, democracia y socialismo


Guillermo Almeyra

Por un lado está la cínica y mentirosa campaña desenfrenada de la CNN y de todos los medios y gobiernos de derecha contra el sistema político cubano. Es evidente el lazo que existe entre el Departamento de Estado y la manifestación en Miami dirigida por la cantante Gloria Estefan, hija de un ministro del dictador Batista, que contó con la participación del terrorista y multiasesino Posada Carriles en apoyo a las llamadas Damas de Blanco y el huelguista de hambre Guillermo Fariñas que, como éstas, pide la intervención de la ONU, de la OEA y de Estados Unidos, no sólo en Cuba sino también en Venezuela, para respaldar a la oposición proimperialista.
Leer mas...AQUI

Declaraciones oficiales… ¿y la realidad?


Antonio Gershenson

Altos funcionarios se dieron vuelo en la reunión internacional sobre energía en Cancún. También estuvieron varias de sus trasnacionales favoritas. Lo menos que podemos hacer es comentar algunas declaraciones.

Se agotaron los yacimientos por falta de inversión privada. ¿Cuándo empezó la principal declinación de la producción? El punto más alto de la producción fue en 2004, con 3 millones 383 mil barriles diarios. Poco más de la mitad del primer gobierno panista, del cual el actual Presidente fue por un tiempo secretario de Energía.
Leer mas...AQUI

La historia (posible) de dos naciones


Rolando Cordera Campos

En semanas recientes ha habido en Estados Unidos acontecimientos novedosos dentro de la que parecía una estrategia condenada al fracaso. Obama y su partido aprueban la reforma de salud y añaden importantes previsiones sobre la administración de los préstamos y becas para los estudiantes universitarios; el presidente asume sus capacidades ejecutivas y nombra a dos miembros del Consejo de Relaciones Laborales, identificados con los sindicatos; el equipo gubernamental adelanta algunas líneas maestras para acometer la otra "reforma de las reformas"
Leer mas...AQUI
Nostalgia del Caudillo

Porfirio Muñoz Ledo La edición 122 de la Asamblea de la Unión Interparlamentaria Mundial planteó esta semana en Bangkok, como tema central, la contribución de los parlamentos a la gobernabilidad y la reconciliación política. Escuchamos numerosos y dispares discursos, ninguno que diera lugar al optimismo. La benevolencia de mis compañeros me llevó a la tribuna y creí prudente esbozar un análisis comparado de la cuestión. Definir primero que la gobernabilidad democrática es la capacidad efectiva de los sistemas políticos para ejercer las atribuciones del poder público y atender las necesidades de la población en un clima de paz, equidad y libertad. Destaqué que la extensión del desorden económico a que condujo el período neoliberal, con la consecuente agravación de los problemas sociales y la pr.. [+] Ver mas

Percepciones y realidades

Julio Pimentel Ramírez En estos días de vacaciones de Semana Santa, caracterizados por las sincréticas conmemoraciones religiosas mexicanas y su mezcla con el esparcimiento en playas y otros destinos turísticos, continúa la violencia del narcotráfico y el crimen organizado que desde hace tres años mantiene al pueblo en la senda de un calvario sembrado de torturas, levantones, ejecuciones, entre otros actos de dolor y muerte; mientras el gobierno espurio decreta un nuevo gasolinazo que afectará, aún más, al ya deteriorado bolsillo de la mayor parte de la población. A su regreso los vacacionistas encontrarán este regalo del gobierno espurio: a partir de este sábado 3 de abril de nueva cuenta se incrementan los precios de las gasolinas y el diesel, lo que redundará en aumentos de todos los productos y co.. [+] Ver mas

La banca estatal salvó a Brasil de la crisis global


Alfredo Jalife-Rahme Bajo la Lupa Antecedentes: El dinero del narcotráfico salvó a la banca anglosajona durante la crisis global (ver Bajo la Lupa; 16.12.09). Un mes más tarde expusimos que los bancos de China y Brasil, primordialmente estatales, habían desplazado a los de EU y Gran Bretaña (GB) de los primeros sitiales (Bajo la Lupa; 13.1.10). México no posee una banca estatal propiamente dicha --cuando entregó a cambio de “espejitos medievales rotos” y “espejismos teológicos neoliberales” alrededor del 90% de su banca nacional (hecho insólito en el planeta), en términos de “capitalización de mercado”--, lo que, a nuestro humilde entender, forma parte consubstancial de su perenne crisis financiera desde el gradual desmantelamiento de su sistema bancario y de seguros, promovido por su.. [+] Ver mas

Carranza, carrancistas y carranclanes

Alvaro Cepeda Neri Las publicaciones históricas son un boom (palabra inglesa que aparece en el Diccionario de dudas de Manuel Seco, como súbito, repentino auge; en este caso, de libros, ensayos, artículos... y notas de bibliografía) editorial, ya sea por apetito comercial y protagonismo efímero (como con los historiadores oficiales: Villalpando y Aguilar Camín, etc.), o para divulgar con pocas nuevas investigaciones e interpretaciones al “ahí se va”, hechos de las dos Revoluciones (pasando por alto su factor común: La Revolución de Ayutla). Se ocupan, por ejemplo, del final del porfirismo, dejando de lado que maderismo y carrancismo pretendieron regurgitar al antiguo régimen, de no haber sido por la irrupción de Villa, Zapata, Obregón y Calles quienes con el pueblo campesino y obrero que escuchó e.. [+] Ver mas

Es fermento del espírit
u

Jorge Eugenio Ortiz Gallegos La Iglesia es algo distinto Cuán expresiva resulta la metáfora de la semilla de mostaza o la de levadura (v. Mateo 13-31-34); en ambas parábolas se alude manifiestamente a la fuerza de la germinación, crecimiento y desarrollo de un acontecer viviente que necesita de su tiempo. A la Iglesia existente, se le advierte y se le reconoce por su extensión cuantitativa y explicitante, sin embargo nuestra responsabilidad para la semilla no es máxima, sino que en nosotros como cristianos hay camino: a veces terreno pedregoso o de cardas, donde es posible que las cardas ahoguen, como en la parábola del sembrador, del todo o en parte las buenas plantas fructificantes de Dios. La crisis degenera en verdadera crisis si la Iglesia sigue perdiendo conciencia de sus defectos y carencias, ol.. [+] Ver mas

Sabios que son los aluxes

María Teresa Jardí Culturalmente soy una escéptica y además cuando trabajaba en CENAMI, que entonces era la Secretaría Ejecutiva de la Comisión Episcopal para Indígenas, viajaba a comunidades indígenas todo el tiempo. Y, en una ocasión, cuando los católicos ricos manipulados convenientemente por el PRI, por algún problema jurídico, seguramente, que no recuerdo, fui a San Juan Chamula y para mi sorpresa encontré al santo patrono de la iglesia en una jaula y de cara a la pared, el Mayordomo de la iglesia, al preguntarle de qué iba la cosa, me explicó: “que estaba castigado porque se había portado mal, porque Don Samuel había acogido a los hermanos separados”, que en realidad eran los pobres del lugar “y que incluso les había comprado un terreno y que como ellos, los chamulas, no tenían poder.. [+] Ver mas

Mensaje AMLO 29 de marzo del 2010

RegeneracionTV — 28 de marzo de 2010 — Andrés Manuel López Obrador da su punto de vista sobre la visita de Hillary Clinton a México: cooperación sí, intervencionismo no