época de oroentre 1996 y 2003, cuando algunos consejeros y magistrados electorales lograron minimizar ese pecado de origen y escuchar verdaderamente a la ciudadanía. Hoy, sin embargo, estas dos instituciones vuelven a dar la espalda a la sociedad.
El desprestigio se inicia en 2003 con la total exclusión de las fuerzas de izquierda y la imposición por Santiago Creel, entonces secretario de Gobernación de Vicente Fox, y Elba Esther Gordillo, coordinadora de la fracción parlamentaria del Partido Revolucionario Institucional en la Cámara de Diputados, de nueve grises consejeros electorales sin mayor conocimiento en la materia. La tendencia se consolida en 2006, cuando tanto el IFE como el TEPJF fueron cómplices de las ilegalidades cometidas por Felipe Calderón y Vicente Fox y se negaron a acceder a la demanda ciudadana de esclarecer los resultados por medio de un recuento total de la votación.
En 2012, este ciclo de oprobio se cierra y se corona. La semana pasada, los magistrados del TEPJF no solamente avalaron una elección a todas luces anticonstitucional e irregular, sino que lo hicieron poniéndose de pie para aplaudir con abyección un ejercicio supuestamente ejemplar
donde se respetaron a cabalidad los principios constitucionales que deben imperar en toda elección de carácter democrática
. Todo pudor quedó en el pasado.
determinancia, o relevancia, de las irregularidades cometidas. Sin embargo, en aquel momento los magistrados también tomaron algunas medidas para por lo menos simular que estaban haciendo su trabajo.
Ver mas
Síguenos en twitter @radioamlo