jueves, 9 de abril de 2009

Los celos políticos de Gordillo marcaron la suerte de Jiménez

En tan sólo un año pasó de protegido a legislador incómodo
Su cercanía con miembros del gabinete panista, causa del distanciamiento

La noche del 13 de marzo de 2008, Elba Esther Gordillo Morales tuvo invitados de lujo a cenar en su casa: los secretarios Juan Camilo Mouriño, de Gobernación, y Ernesto Cordero, de Desarrollo Social, con sus respectivas parejas; Fernando González Sánchez, yerno de Gordillo, llegó con su esposa, Maricruz Montelongo.

La cena la había promovido con semanas de antelación Miguel Ángel Jiménez Godínez, hasta entonces coordinador de los diputados del Partido Nueva Alianza (Panal), del que fue primer presidente. Pero unos 15 días atrás, su amigo Fernando González le preguntó nervioso: "¿Le decimos a la Maestra?".
Leer Nota AQUI