domingo, 8 de marzo de 2009

Se convirtió el gobierno en un comité al servicio de los barones del dinero, desde que Calderón usurpó la Presidencia, declara López Obrador

Temoris, Chihuahua

Domingo 08 de marzo de 2009


* Se ha beneficiado la mafia de la política con la privatización de los bienes nacionales, como los ferrocarriles, los bancos y las minas, asegura

* Esa minoría rapaz ha puesto en su lista la industria petrolera, pero la movilización ciudadana impidió que Calderón privatizara el sector, subraya

* Pide al pueblo de México seguir adelante en la lucha por el cambio de la política económica neoliberal y no desfallecer ni rendirse


Desde la Sierra Alta de Chihuahua, Andrés Manuel López Obrador afirmó que México no tiene un gobierno emanado del pueblo y para el pueblo, porque desde hace dos años –cuando Felipe Calderón se robó la Presidencia de la República— se convirtió en un comité al servicio de la mafia de la política, de una minoría rapaz.

La mafia del poder y del dinero está conformada por escasas 30 personas, cantidad inferior a los 300 que dominaban al país en la época del Porfiriato, aclaró el presidente legítimo de México.

Destacó que la mafia de la política o la banda de los 30 se apoderó de los bienes de la nación, principalmente de empresas como Teléfonos de México, los ferrocarriles, las minas, los bancos y las líneas aéreas.

Pero lo que más ambicionan los barones del dinero es el petróleo, como lo demuestra la intentona del año pasado de Calderón Hinojosa para reformar las leyes con la deliberada intención de entregar el sector a empresas extranjeras.

Para bien de la nación, se logró frenar un acto de traición a la Patria, “porque los mexicanos decidimos proteger los bienes de la Nación y del pueblo. La patria no se vende, se ama y se defiende”, declaró.

En la asamblea informativa con habitantes de este municipio, indicó que los barones del dinero tienen acaparado el presupuesto público, de aproximadamente 3 billones de pesos para este año, y lo utilizan para apoyar y rescatar a banqueros y grandes empresarios.

De ahí la necesidad de avanzar hacia la transformación del país, “porque no queremos que sea México sea país de unos cuantos”, urgió.

Si los 3 billones de pesos del presupuesto público se repartieran con justicia entre las 26 millones de familias mexicanas, a cada una le correspondería un promedio de 10 mil pesos mensuales, abundó.

En la jornada de este día, subrayó que aumentaron los niveles de pobreza, desempleo y carestía de la vida, desde que Calderón usurpó la Presidencia de la República; es decir, “en vez de que se registre un crecimiento económico, estamos en pleno retroceso”, alertó.

“La grave crisis económica y de bienestar social que padece el país no es por el destino ni por la fatalidad, tampoco porque así nos tocara vivir, sino por el mal gobierno de Calderón”, enfatizó.

Durante el penúltimo día de gira de trabajo por los 2 mil 38 municipios del país, que corresponden al régimen de partidos, sostuvo que no es posible que México esté pasando por una etapa de decadencia, si cuenta con suficientes recursos naturales como oro, plata, cobre, petróleo, gas, tierra para la producción agrícola, litorales y un pueblo trabajador.

Y recordó que, a partir del fraude electoral del 2006, tomó la decisión de encabezar un movimiento que lucha por un cambio real de México y sus instituciones y para hacer realidad el principio de “arriba los pobres y abajo los privilegios”.

Desde esa fecha, recordó López Obrador, y del inicio de los recorridos por la geografía nacional, un importante número de hombres y mujeres, libres y conscientes, “se nos han unido para sacar adelante al país del atraso en que se encuentra y sacar a nuestro pueblo del abandono, la pobreza y la marginación en que vive”.

En ese tenor, pidió seguir adelante al pueblo de Chihuahua. “No debemos rendirnos, cansarnos o hacernos a un lado; por el contrario, debemos luchar hasta que cambie la forma de hacer política y el modelo económico neoliberal que tanto daño ha hecho al país”, explicó.